Trabajadores cristianos se movilizan en repulsa por los últimos accidentes laborales
Trabajadores cristianos expresan su repulsa ante los últimos accidentes de trabajo en sus diócesis. En Burgos y Córdoba han convocado sendas concentraciones, mientras que en la diócesis de Mérida-Badajoz han hecho público su solidaridad con la familia afectada.
La HOAC de Burgos han convocado una concentración para recordar a las últimas víctimas del trabajo el 29 de septiembre de 2022, a las 20:30 horas, en la Plaza del Cid, junto al Teatro Principal, para insistir en que “la siniestralidad laboral genera un enorme sufrimiento a trabajadores y familias”. Esta concentración, en concreto, servirá para expresar la solidaridad con la familia y allegados de tres trabajadores que perdieron la vida mientras trabajaban.
El pasado mes de julio, un camionero de 43 años, natural de Cantabria, perdió la vida en una colisión frontal entre dos camiones registrada en la N-627, a la altura del término municipal de Úrbel del Castillo. J. U., albañil de 60 años, y vecino de Tosantos, murió el 31 de agosto, al caer desde el tejado de una vivienda en el que trabajaba en la localidad de Villambistia. Y J. J. L. A., un transportista de 57 años, vecino de la localidad soriana de Navaleno, falleció en la tarde del 6 de septiembre, tras sufrir una salida de vía cuando circulaba por la CL-117, muy cerca de Regumiel de la Sierra.
Este movimiento especializado de la Iglesia señala que “nadie, absolutamente nadie, debería perder la vida por trabajar”, por lo que desde la campaña “Trabajo digno para una sociedad decente”, reafirman su “compromiso en la lucha por unas condiciones de trabajo dignas y por la defensa de la salud laboral”.
Además, denuncia que entre las causas de los accidentes de trabajo está la falta de control en las medidas de seguridad, la escasa formación, el empleo precario, la subcontratación o la economía sumergida, circunstancias que “se acentúan con la actual crisis económica y sanitaria”.
Termina el comunicado, señalando que “No es mala suerte. No es inevitable” y que ” el trabajo debe ser un lugar donde, además de ganarnos un sueldo para vivir, podamos desarrollar nuestras capacidades y ponerlas al servicio del bien común. no un sitio donde enfermar o incluso morir”.
Concentración en Córdoba
Por su parte, la HOAC de Córdoba se concentra en solidaridad por las recientes víctimas de la siniestralidad laboral en la provincia, el 30 de septiembre, a las 20:30 horas en el Bulevar del Gran Capitán (Junto a la Parroquia de San Nicolás).
Las trabajadoras y los trabajadores cristianos de Córdoba llevan hace años convocando concentraciones cada vez que muere una persona trabajadora en accidente laboral.
En esta ocasión, en recuerdo de Juan, de 45 años, fallecido al caer de un tejado, el 13 de septiembre en Priego de Córdoba y Araceli una trabajadora de SADECO, de 50 años, delegada sindical atropellada por un camión en el punto limpio de Alcolea que ha muerto tras cuatro días ingresada en la UCI a consecuencia de las heridas sufridas en dicho accidente.
En lo que va de año, ya son 11 las personas trabajadores muertes en la provincia mientras intentaban ganarse la vida.
Solidaridad y cercanía con las víctimas
Por otro lado, ante la noticia de la muerte de un trabajador de 45 años en accidente laboral ocurrido la semana pasada en Calera de León localidad de la provincia de Badajoz, la HOAC de Mérida-Badajoz ha querido expresar el dolor que supone el fallecimiento de una persona en estas circunstancias y su cercanía a los familiares.
La muerte en accidente laboral es una tragedia humana porque el trabajo es para la vida. Como trabajadores cristianos, hacen un llamamiento al conjunto de la Iglesia y de la sociedad “a no permanecer indiferentesy a que hagan suyo el dolor y la esperanza de nuestros hermanos y hermanas del mundo del trabajo”. “El trabajo es para la vida. Ni una muerte más”, señalan.
A. M. S., de 45 años, perdió la vida al caerse desde una máquina telescópica, cuando se encontraba trabajando en Calera de León, en la comarca de Tentudía, en el sur de Extremadura. Era de Cabeza la Vaca, aunque vivía en Fuente de Cantos, y tenía dos niños de corta edad. Se trata de un trabajador que estaba pintando la fachada de una vivienda en la calle Espronceda de la localidad pacense.
Redactor jefe de Noticias Obreras