Febrero registra la cifra más baja de paro en 17 años y la Seguridad Social marca un récord para este mes

Febrero registra la cifra más baja de paro en 17 años y la Seguridad Social marca un récord para este mes
El paro registrado desciende ligeramente (-0,23%) en febrero con respeto a enero, situando el conjunto de personas desempleadas en 2.593.449 personas, la cifra más baja en un mes de febrero en los últimos 17 años.

El pasado mes se crearon 100.340 empleos, sobre todo los sectores de educación, hostelería y construcción y el número de personas afiliadas a la Seguridad Social se sitúa en 21.196.154 cotizantes, el dato más alto de la serie histórica para este mes.

La reducción del desempleo en 5.994 personas en febrero, no obstante, es inferior a la del mismo mes del año pasado febrero de 2024 (-7.452) y a la de 2022 (-11.394).

En el último año el desempleo acumula un descenso de 166.959 personas, lo que supone casi un 6,05% menos, con un retroceso del paro femenino de 92.612 mujeres (-5,59%) y una caída del desempleo masculino de 74.347 (-6,73%).

El sector servicios experimentó un descenso del desempleo en 5.764 desempleados, mientras que la construcción lo hizo en 3.409 parados y la industria, en 2.214 personas. En la agricultura el paro aumentó en 210 personas y el colectivo sin empleo anterior aumentó en 5.183 desempleados más.

El paro cayó en febrero en ambos sexos, aunque fue mayor en el caso de los hombres. El paro masculino descendió en 5.517 hombres (-0,53%) en comparación a enero, mientras que el femenino disminuyó en 477 mujeres (-0,03%).

Por edades, el paro entre los jóvenes menores de 25 años se incrementó en 6.522 personas (+3,46%) en comparación con enero, hasta sumar194.886 desempleados. Con todo se trata de un mínimo histórico para un mes de febrero.

En febrero de este año se registraron 1.098.491 contratos, un 3,42% menos que en el mismo mes de 2024. Del total de contratos. 1.098.491, el 43,85% fueron indefinidos (481.683) un 7,98% menos respecto a un año antes.

Reacciones sindicales

UGT destaca que “la calidad y estabilidad del empleo sigue mejorando gracias los cambios que introdujo reforma laboral de 2021, de manera que la tasa de temporalidad en febrero ha sido del 11,9%, 0,8 puntos menos que hace un año y 15,1 puntos menos que la que se registraba en febrero de 2021, antes de la reforma”.

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Para este sindicato, “los datos expuestos ponen de relieve la fortaleza de nuestro mercado de trabajo, incluso en un contexto de incertidumbre internacional como el actual”. No solo se crea más empleo, apunta la organización de trabajadores, sino que “es de mayor calidad, en tanto se asienta sobre la figura del contrato indefinido”.

No obstante, matiza, “todavía existen importantes vías de mejora”, sobre todo, salariales, “coherente con la situación de bonanza económica general y de las empresas en nuestro país”, sin olvidarse de la reducción del tiempo de trabajo.

Además, para UGT, las mejoras deben llega a toda la población trabajadora, por lo que “se deben seguir reforzando las políticas activas de empleo con el objetivo de combatir el paro de larga duración y mejorar la inserción laboral de los colectivos más vulnerables”.

La secretaria de Acción Sindical y Empleo de USO, Sara García, reconoce que “el descenso del paro en febrero es positivo” aunque puntualiza que “no podemos ignorar las debilidades estructurales del mercado laboral español”, como muestra el hecho de que la contratación indefinida retroceda un 7,98 % y los sectores feminizados sigan concentrando el empleo más precario”.

USO insiste en la necesidad de un cambio estructural en las políticas laborales que priorice la estabilidad, la igualdad y la calidad del empleo. “Hay que reforzar el control sobre el abuso de la temporalidad, los contratos fijos discontinuos y la utilización del contrato indefinido como falso temporal”.

También, reclama García planes de empleo con enfoque de género junto con el impulso de medidas que garanticen la corresponsabilidad, sin olvidar tampoco a los jóvenes, con programas específicos de empleo que reduzcan su vulnerabilidad ante la precariedad y el desempleo”.

“No basta con celebrar el descenso del paro si éste no se traduce en mejoras reales para las trabajadoras y trabajadores”, concluye Sara García.