El diálogo sobre el tiempo de trabajo arranca con el control horario en las empresas

El diálogo sobre el tiempo de trabajo arranca con el control horario en las empresas
La primera reunión de la mesa de diálogo social sobre la reducción del tiempo de trabajo celebrada hoy ha servido fundamental para fijar el método de negociación y avanzar la próxima modificación del control de las horas de trabajo para evitar lo tiempos extras no declarados.

Tras este primer encuentro el secretario de Estado de Trabajo, Joaquín Pérez Rey, ha señalado el clima constructivo de los interlocutores y ha llegado a decir que se trata de un día histórico.

“Hoy se inaugura un debate que lleva 40 años aparcado, el de reducir el tiempo que trabajamos para ganar calidad de vida, para vivir mejor, para que las empresas sean más productivas y se genere empleo”, ha comentado.

“Nuestros objetivos son que el registro horario sea un instrumento eficaz que permita a la Inspección de Trabajo actuar de manera contundente y práctica en aquellos sectores donde se producen incumplimientos y alcanzar esa reducción de la jornada a 37,5 horas en 2025. El camino que tenemos que recorrer conjuntamente para alcanzar esos objetivos es precisamente el trabajo que va a hacer la mesa de diálogo social y el que va a hacer también ese diálogo bipartito”, ha precisado Pérez Rey.

La secretaria de Empleo y Acción Sindical de CCOO, Mari Cruz Vicente, ha subrayado que el diálogo abierto es “más amplio que la reducción de la jornada laboral legal”, y ha explicado que esta primera toma de contacto ha abordado cuestiones que tienen que ver con el “perímetro del diálogo social”.

El vicesecretario general de UGT, Fernando Luján, ha identificado como objetivos “claros e inamovibles” limitar en la jornada semanal de trabajo a las 38,5 horas y después, en 2025, a las 37,5 horas.

Dos mesas de diálogo paralelas

Los representantes sindicales han coincidido en remarcar que abrirán una negociación a dos bandas con los representantes empresariales sobre cómo aplicar e implantar la reducción horaria, en paralelo al ámbito de diálogo impulsado por el Gobierno.

“Pero esto no significa que se vaya a suspender la mesa con el Gobierno. Simplemente vamos a ver en el ámbito bipartito cómo podemos transitar de una legislación a otra de la mejor manera posible. Si llegamos a acuerdos, perfecto, pero si no, la reducción del tiempo de trabajo no está en cuestión”, ha aclarado Luján.

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Su compañera Mari Cruz Vicente, ha indicado que aprovecharán “un margen de tiempo” para trata de acercar posturas “cuanto antes” para después analizar si “encaja” con el planteamiento del Ministerio de Trabajo. En todo caso, ha expresado el respeto por “el compromiso” que el Gobierno de coalición asumió en su programa de rebajar la jornada laboral semanal a las 37,5 horas.

Así mismo, ha advertido que “lo que hemos planteado en el ámbito bipartito es que las conversaciones no van a ser sine die”, al tiempo que ha declarado que la negociación colectiva “tiene que seguir haciendo su papel, como lo ha hecho durante estos 40 años reduciendo jornadas con el objetivo que CCOO en este caso tiene, de llegar a las 35 horas semanales”.

El secretario de Estado, Pérez Rey, ha mostrado su voluntad de impulsar la rebaja de la jornada laboral en una sociedad que “valora más los cuidados, el tiempo libre, la productividad y la conciliación”.

De hecho, ha mostrado la intención del Gobierno Pérez de modificar los sistemas de registro horario, obligatorios desde 2019 bajo sanciones contenidas en la Ley sobre Infracciones y Sanciones en el Orden Social, para “no dejar espacio a elementos de fraude” y convertir la legislación laboral “en bisutería”. Su ambición es que estos instrumentos de control horario sean eficaces y permitan que la Inspección de

Para Vicente, la mejora del registro de la jornada laboral ha de servir para evitar las horas extraordinarias, “sobre todo aquellas horas extraordinarias que no son retribuidas”.

La sindicalista ha apuntado que “es una buena noticia que abramos este marco de diálogo entre los agentes sociales, para hablar también de los descansos, de cómo están articulados los permisos retribuidos, para hablar del tiempo de trabajo en general”.