¿En el nombre de quién se ha masacrado a 37 personas en Nador-Melilla?
En el nombre de los que ostentan el poder político de las grandes potencias mundiales, de las grande multinacionales, que son los que deciden cómo tiene el mundo y que se sienten dueños de la vida y de la muerte; se ha masacrado en el nombre de los que condenan a los pobres de la tierra en su propia nación a vivir sin vida, a arrebatarles sus derechos, su dignidad, a despojarles de sus medios de vida, de lo que necesitan para vivir, para subsistir.
En el nombre de los que ostentan el poder económico, que son los que deciden saquear y expoliar países y continentes, como el africano. Son los que deciden apropiarse de los recursos naturales, causando corrupción, violencia y guerras. Son los que comercializan con las ventas de armas. Lo que más se vende al continente africano son armas. Son los que contratan mercenarios para causar golpes de estados si un gobierno quiere ser fiel al mandato de que su pueblo prospere y viva en libertad.
En el nombre de los que ostentan el poder militar y policial, el poder de la fuerza, que son los que ejecutan las órdenes del poder político y económico. Son los que apalean a los empobrecidos en las fronteras, robándoles lo poco que tienen. Son los que destruyen la vida, los que asesinan a niños y niñas, hombres y mujeres, personas mayores, los que violan a mujeres y niñas; son los que crean ejércitos de niños soldados.
En el nombre de los neoliberales que han proyectado un mundo basado en que el 1% de la población se apropie del 99% de la riqueza. Unos tienen el derecho a vivir desde la seguridad, el lujo y el confort; los otros no tienen derecho a nada, ni siquiera a vivir, solo a ser un recurso de mano de obra barata para aumentar sus beneficios y quien no sea mano de obra barata, se considerará sobrante.
En el nombre de los que desprecian a los pobres de la tierra y los condena a la miseria extrema, a la hambruna, a la sed y a no sanar enfermedades curables. Se ha masacrado a estas personas en el nombre del racismo, la xenofobia y la aporofobia de la sociedad opulenta, sin miramiento y sin ningún cuestionamiento ético.
En definitiva, los poderosos, los que gobiernan este mundo, siguen ejerciendo sus estrategias para extender sus domino en detrimento de los demás. Unos poderosos que ven en la migración una decisión de los pobres de la tierra que alteran sus planes. Los poderosos de este mundo les dicen a los empobrecidos: ¿Cómo osáis a venir a nuestros países? ¿Quién os ha dado permiso para ello? Estos poderosos contratan países sicarios, que violan los derechos humanos, para que a través de la brutalidad y los asesinatos los rechacen y sea un aviso a navegantes: Quien venga del horror de la guerra y el hambre, se va a encontrar el horror de la represión aplaudida por los gobiernos del Norte.
Porque seguimos creyendo en la humanidad, en el proyecto humanizador, de creyentes y no creyentes, condenamos esta masacre y repudiamos las palabras de gobernantes que lo justifican y animan a seguir reprimiendo. Nos avergüenza Europa.
Sentimos una inmensa tristeza e indignación por esta masacre, que responde a que Marruecos se ha convertido en un país sicario a cambio de contraprestaciones, que persigue a personas migrantes y que va a la caza de personas negras. La gente que no ha podido cruzar la valla, recibirán palizas y serán arrojadas al desierto. Esto se está haciendo desde hace años.
Un abrazo para estas personas enterradas sin ninguna investigación y un abrazo para sus familias, con el deseo que transformar el mundo, de tal manera que nadie tenga que salir de su país porque tienen las condiciones dignas para vivir. Que estas personas masacradas encuentren el descanso y estén en un lugar lleno de ternura, de vida, sin injusticias, sin vallas ni concertinas; que sus sueños se hagan realidad.
Consiliario de la HOAC de Murcia. Militante de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) y de la Asociación Amigos de Ritsona de apoyo a personas refugiadas. Autor del blog Sembrando sueños, construyendo humanidad