Los riesgos de la temporalidad

El dato

En España, la precariedad laboral sigue siendo una realidad alarmante que afecta directamente la salud y seguridad de las personas trabajadoras. Aunque la legislación en materia de prevención de riesgos laborales es clara y está bien estructurada, la situación de muchas personas, especialmente aquellas en condiciones precarias, revela una vulnerabilidad que va más allá de los riesgos comunes. Los contratos temporales, la falta de estabilidad y la sobrecarga de trabajo son factores clave que incrementan la probabilidad de sufrir accidentes laborales o enfermedades profesionales.

A lo largo de 2023, más de 721 personas trabajadoras perdieron la vida en accidentes laborales. Esta cifra es un claro reflejo de que las condiciones de empleo, especialmente para quienes sufren inestabilidad, juegan un papel determinante en la seguridad en el trabajo. Quienes tienen contratos temporales o empleos de corta duración se enfrentan a mayores riesgos: tienen menos acceso a formación en prevención y, en muchos casos, quienes les emplean no priorizan la implementación de medidas de seguridad. Esto crea un entorno donde la urgencia de cumplir con las tareas, sumada a la inexperiencia o el desconocimiento de los riesgos, aumenta las probabilidades de sufrir lesiones graves o incluso mortales.

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Juani Sosa

Militante de la HOAC de Canarias