La inflación da un respiro en marzo a pesar de la incertidumbre por la guerra arancelaria

La inflación ha bajado siete décimas en marzo, hasta el 2,3 %, debido principalmente al abaratamiento de la electricidad y, en menor medida, de los carburantes y lubricantes, según el dato adelantado publicado este viernes por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Las fuertes lluvias, según ha explicado el Ministerio de Economía, Comercio y Empresa. habrían conseguido abaratar el coste de la energía, hasta romper la tendencia alcista que los precios venían experimentando desde hace cinco meses.
La inflación subyacente, excluidos alimentos frescos y energía, también se redujo dos décimas y alcanzó el 2%, hasta situarse en los niveles más bajos desde hace más de tres años, en concreto desde diciembre de 2021.
El sindicato UGT advierte que la guerra arancelaria podría tener un impacto alcista en los precios, por lo que reclama políticas públicas para proteger del encarecimiento de la vida a las personas y familias trabajadores.
Dado que “los beneficios siguen alcanzando valores históricos”, considera que hay margen para que “aumenten consistentemente los salarios, impulsando un reparto más justo de la riqueza generada”, sin necesidad de subir los precios de los bienes y servicios.
Así, plantea reforzar la negociación colectiva, con el objetivo de proteger y mejorar el poder de compra de las personas trabajadoras, además de la adopción de medidas para “evitar que la burbuja especulativa siga lastrando la vida presente y futura de varias generaciones” que cada vez destinan más parte de sus ingresos para acceder a la vivienda.

Redactor jefe de Noticias Obreras