La emancipación juvenil cae a su nivel más bajo en 20 años por la crisis de vivienda

La crisis de la vivienda en España se ceba con la población joven. Solo el 14,8% de los jóvenes ha logrado independizarse en el primer semestre de 2024, la cifra más baja desde 2006.
A pesar de un incremento en los salarios y una ligera mejora en la tasa de desempleo juvenil, el constante aumento de los precios de alquiler ha llevado a que los jóvenes deban destinar una porción significativa de sus ingresos a la vivienda, según el último informe del Observatorio de Emancipación del Consejo de la Juventud de España.
El salario medio de un joven se sitúa en 1.048 euros, mientras que el alquiler promedio asciende a 1.072 euros, lo que genera que el 70,5% de los hogares jóvenes tenga que sobreendeudarse dedicando más del 40 % de sus ingresos a pagar la renta.
De hecho, las personas jóvenes por lo general están obligados a destinar más del 100 % del salario para independizarse en solitario. Si optan por compartir piso, necesitan dedicar casi el 35 % del salario para hacerse con una habitación. La situación es especialmente crítica para las mujeres jóvenes y para aquellos en el rango de edad de 25 a 29 años.
Además, la pobreza laboral persiste, tres de cada 10 personas jóvenes en España se encuentran en riesgo de pobreza o de exclusión social. El 22,8 % de las personas jóvenes que tenía un trabajo también son pobres, lo que explica en buena medida que el solo el 25,5 % de la población joven con trabajo vivía fuera del hogar familiar.
En el semestre analizado, el primero de 2024, la tasa de empleo joven se mantuvo estable con respecto al mismo periodo del año anterior, aunque la subida del salario mínimo interprofesional en 2023 afectó en gran medida a los sueldos que cobraban las personas jóvenes en España.
El salario mediano joven, el que divide en dos mitades el conjunto de la muestra, subió un 4,0 % interanual hasta alcanzar los 12.578,32 euros netos anuales, aunque con el efecto de la inflación, el poder adquisitivo se redujo un 6,7 %. El 25,7 % de las personas jóvenes empleadas estaban contratadas a tiempo parcial, el 42,3% de forma involuntaria.
El aumento del salario mínimo y la implementación de bonos de alquiler no parece estar siendo eficaz para facilitar el acceso a la vivienda de la población joven. En Andalucía, la segunda convocatoria del Bono Alquiler Joven, que ofrece una ayuda mensual de 250 euros para jóvenes de entre 18 y 35 años, agotó sus 8.500 solicitudes en menos de 24 horas, evidenciando la alta demanda y la insuficiencia de los recursos disponibles.
El Consejo de la Juventud entiende como imperativo tomar medidas efectivas y sostenibles para abordar esta crisis, promoviendo políticas que aumenten la oferta de viviendas asequibles y faciliten la transición de los jóvenes hacia una vida independiente.

Redactor jefe de Noticias Obreras