Círculos de silencio: con y por las personas migrantes

Círculos de silencio: con y por las personas migrantes
En la última jornada nacional de delegados diocesanos de migraciones vimos la necesidad de compartir experiencias y criterios en la realización de los círculos de silencio, pero también queríamos animar a las diócesis que todavía no se lo habían planteado por desconocimiento o miedo.

Nuestro deseo es que se vaya promoviendo esta presencia simbólica y que sea una acción común dentro del conjunto de nuestra Iglesia española para reivindicar una sociedad que evolucione humanamente porque todas las personas merecemos un trato digno, sin importar su condición social, legal u origen.

Actualmente, los círculos de silencio se realizan en varios países: en Francia (donde se originaron en 2007 por iniciativa del franciscano Alain Richard) en más de 170 ciudades, en España en más de 40 ciudades y, hace pocos años, se unió Marruecos.

En cada ciudad ha tenido un origen distinto, a veces desde la Iglesia y otras desde la sociedad civil pero, en general, ha sido como respuesta a la vulnerabilidad de derechos de las personas migrantes (pero no solo, porque también en algunos lugares se han dedicado círculos de silencio a otras realidades de injusticia y pobreza). Lo que pretendemos es concienciar y denunciar desde la cultura no violenta, en una actitud de respeto y apoyo junto al que sufre.

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