“¡No más muertes en el trabajo! Y esforcémonos por lograrlo”
Comunicado. “¡No más muertes en el trabajo! Y esforcémonos por lograrlo”. Con este lema se han celebrado durante los días 26 y 27 de noviembre, en Ávila, las XXVIII Jornadas Generales de Pastoral del Trabajo.
Con la participación de más de un centenar de personas, responsables diocesanas de esta pastoral y militantes de movimientos de trabajadoras y trabajadores cristianos de 30 diócesis, en un ambiente de reflexión, convivencia, celebración y denuncia.
Se inició el encuentro con la oración y el saludo de monseñor D. Abilio Martínez Varea, obispo de Osma-Soria, responsable del Departamento de Pastoral del Trabajo de la Conferencia Episcopal Española. Nos urge el dolor injusto que la falta de salud y seguridad en el trabajo provoca diariamente, en nuestro país.
En 2021 se han producido más de un millón de accidentes laborales, de ellos 741 mortales. Hacemos nuestra la preocupación, expresada en muchas ocasiones por el papa Francisco: “El año pasado las muertes en el trabajo fueron muchas, demasiadas. No son números, son personas. (…) Desafortunadamente, se considera la seguridad en el lugar de trabajo como un costo, se está partiendo de una suposición incorrecta. (…) La verdadera riqueza son las personas: sin ellas no hay comunidad de trabajo, no hay empresa, no hay economía. (…) Trabajar con seguridad permite que cada uno exprese lo mejor de sí mismo ganándose el pan de cada día.” Recogemos su llamada: “Cuanto más cuidemos la dignidad del trabajo, más seguros estaremos de que aumentará la calidad y la belleza de las obras creadas.”
En estas Jornadas hemos contado con valiosas aportaciones:
D. Mariano Sanz Lubeiro, secretario de Salud Laboral y Sostenibilidad Medioambiental de la Confederación Sindical de CCOO, que con su ponencia “La seguridad y la salud en el trabajo” nos ha presentado la realidad de la siniestralidad en España. Ha insistido en que hay que situar la prevención de riesgos laborales en el centro (de la recuperación) y a las personas del trabajo en el centro de las políticas. La salud es un derecho fundamental, también en el trabajo. La Ley de Prevención de Riesgos Laborales, siendo un instrumento muy válido, los cambios producidos desde su promulgación, hace necesarios cambios legislativos que ayuden a acelerar la resolución de los casos, evitando un dolor innecesario. Avanzar en, la detección de las enfermedades laborales que permanecen ocultas, señalando claramente responsabilidades, facilitar la acción sindical en las pequeñas empresas y continuar la senda del incremento de la contratación indefinida, eliminando la temporalidad. Condiciones indispensables para acabar con la lacra de la falta de salud y seguridad en el trabajo.
D. Miguel Cruz Santiago, militante de la HOAC de Córdoba y presidente de la Asociación de Víctimas de Accidentes y Enfermedades Laborales de Andalucía (AVAELA), con su ponencia: “¡No más muertes en el trabajo! Y esforcémonos en lograrlo”, nos ha ayudado a entender que el trabajo, o es seguro o no es trabajo. Ha partido de su larga experiencia de acompañamiento a las víctimas, en el proceso que se vive tras un siniestro. Ha remarcado como la dignidad del trabajo está en el hecho de que es la persona quien lo realiza. Este debe ser el criterio fundamental a hora de organizar tanto el trabajo, como toda la vida económica. El papa Francisco nos recuerda que “la persona es la autora, el centro y el fin de toda la vida económico-social”. “Por eso, toda amenaza a la dignidad y a la vida de las personas repercute en el corazón mismo de la Iglesia, afecta al núcleo de su fe en la encarnación redentora del Hijo de Dios, la compromete en su misión de anunciar el Evangelio de la vida”.
También, hemos compartido tres paneles de experiencias eclesiales en defensa de la vida en el trabajo, que han mostrado caminos por los que es necesario transitar para estar cerca de las víctimas: visibilización del problema, acompañamiento a las víctimas y trabajar con las instituciones, desarrollados por distintos secretariados diocesanos.
Las Jornadas concluyeron con la celebración de la Eucaristía en la parroquia de San Pedro, presidida por Mons. Abilio Martínez Varea en memoria de las víctimas de accidentes laborales, tras la cual nos concentramos en la plaza de Santa Teresa para realizar un Gesto público y lectura del comunicado en solidaridad, denuncia y concienciación y así dar visibilidad a este drama humano de la siniestralidad que acontece en el mundo del trabajo.
Estas jornadas nos impulsan a seguir comprometidos en la defensa de la vida y el trabajo digno y nos une al Papa Francisco en su deseo de que no haya más muertes en el trabajo, asumiendo nuestra responsabilidad en lograrlo.
“¡No más muertes en el trabajo! Y esforcémonos por lograrlo”
Redacción de Noticias Obreras.