Veinte colectivos canarios instan a crear estructuras de convivencia con migrantes

Veinte colectivos canarios instan a crear estructuras de convivencia con migrantes
La Mesa de Migraciones de la Diócesis de Canarias realizó ayer jueves, en la calle Triana de Las Palmas de Gran Canaria, mesas informativas bajo el lema “Aquí construimos futuro con personas migrantes y refugiadas” sobre el trabajo que realizan entidades de la Iglesia en origen, tránsito y destino.

Cientos de estudiantes y viandantes mostraron interés por los proyectos y las personas procedentes de África, y por la trágica realidad de más del millar de muertes anuales que se producen en la ruta canaria. Aunque minoritarios, no faltaron algunos comentarios xenófobos.

En la mesa diocesana participan: Cáritas, Programa Daniela (Religiosas Oblatas), Escuela de Formación Sociopolítica y Fe Cristiana, CONFER, Secretariado de Misiones, Fundación MAIN, Grupos de Solidaridad, Patio de Las Culturas, Encuentro y Solidaridad, Centro Loyola, Comunidades de Vida Cristiana de los Jesuitas, Religiosas del Sagrado Corazón de Jesús, Pastoral Juvenil, Movimiento Junior, Pastoral Familiar, Religiosas Franciscanas Misioneras de María y el Secretariado de Migraciones.

Tras ese acto, en el que también participó Manos Unidas, se celebrará este domingo 25 de septiembre una eucaristía en la Catedral, que presidirá el obispo José Mazuelos, y en la que las ofrendas y oraciones estarán también centradas en las personas migrantes de América Latina.

La directora del Secretariado Diocesano de Migraciones, Loli López hace hincapié, además de la tragedia de migrantes africanos, en que el mayor porcentaje de inmigrantes en Canarias es de América Latina, que se sitúa entre el 85 y el 90% de las personas que llegan a las islas. “La mayoría está en situaciones precarias, en economía sumergida y buena parte está hacinada y con miedo a manifestarse. Esa realidad es en la que también instituciones y ONG debemos afrontar de verdad”, resalta.

Asimismo, la mesa de migraciones realizará el seis de octubre, en la parroquia de Arguineguín, en cuyo puerto llegaron a estar hasta 3.000 migrantes hacinados hace dos años, un taller sobre Igualdad y mujeres migrantes, así como una concentración en la plaza de la iglesia, el nueve de octubre, de denuncia y de llamada a crear una sociedad de convivencia en vez de la sociedad de coexistencia.

Por otro lado, la Mesa Diocesana de Migraciones ha asumido el encargo, hecho el pasado mes de abril en la Jornada Nacional de Migraciones, de realizar un proyecto complementario a las instituciones públicas, llamado corredores de hospitalidad, y que apoyan los dos obispos de las diócesis canarias. Se trata de crear redes de hospitalidad en las diócesis españolas, para acoger a personas jóvenes migrantes extuteladas, que en Canarias podrían superar el millar en los próximos meses.

12.000 migrantes en 9 meses

En cuanto a los datos, en el caso del archipiélago, el descenso registrado el año pasado fue de 4%. Así los migrantes que han arribaron en la costa canaria fueron 20.752, frente a los 21.660 que se contabilizaron en el mismo periodo de 2020. Y en este año los migrantes llegados a Canarias por pateras son unos 12.000, un 15% más que en el mismo periodo de 2021, según Cruz Roja. De ellos, el 53% ha desembarcado en Fuerteventura y Lanzarote. Los menores representan el 13,46% de las llegadas acumuladas en 2022 (1.489 personas) y las mujeres, el 14,94% (1.652). El 80% es derivado a la Península. Por el camino en búsqueda de una vida mejor han muerto, que se sepa, un millar de personas.

Actualmente, hay en torno a 1.500 menores acogidos de manera temporal, para lo que se demanda una solidaridad del resto de autonomías. El colectivo Caminando Fronteras llevó su petición a la Diputación del Común, en la que piden al Gobierno de Canarias una respuesta más rápida para la reagrupación familiar ya que hay una decena de menores en el Archipiélago a la espera de encontrarse con sus progenitores en Europa.

También puedes leer —  La Iglesia de Madrid convoca este sábado una vigilia de oración ante el CIE de Aluche

Día Canario de Migraciones

Igualmente, a las existentes jornadas conmemorativas internacionales y eclesiales, el Parlamento de Canarias aprobó por unanimidad, el pasado mes de julio, declarar el 10 de septiembre el Día Canario de las Migraciones. Tal fecha se eligió por tratarse del aniversario del naufragio del buque Valbanera, en 1919, frente a las costas de Florida y que provocó la muerte de 488 personas. Se trataba mayoritariamente de emigrantes, que habían decidido abandonar su tierra natal para huir de la miseria y buscar un futuro mejor.

Según planteó el diputado David de la Hoz, tales migrantes no eran de piel oscura ni habían salido de África. El buque, propiedad de Naviera Pinillos había salido de Barcelona teniendo como destino Las Antillas. Había hecho escala en Canarias y al abandonar las islas llevaba en su interior 88 tripulantes y 1.142 pasajeros. 742 de ellos habían decidido bajarse en Santiago de Cuba, aunque la mayoría tenía billete hasta La Habana. El resto, que permaneció a bordo fue sorprendido por un huracán, lo que provocó el naufragio. Fue el último viaje del Valbanera.

Para los parlamentarios la elección de la fecha es clave para entender el fenómeno de la inmigración. La pobreza y los conflictos bélicos siempre han obligado a las personas con dificultades extremas a tratar de labrarse una vida digna, aunque sea fuera de su tierra.

Canarias no es ajena a ello. Las sucesivas oleadas de miseria y pobreza que han asolado a las islas en diferentes etapas, han convertido a los canarios primero en emigrantes y ahora en islas receptoras de inmigrantes. Por citar una referencia, entre 1998 y 1932, 70.000 canarios emigraron a Cuba, isla a la que históricamente han sido llevados o ido por necesidad isleños desde la conquista de Canarias y de Cuba.

Según también el diputado Luis Campos, el Día Canario de las Migraciones debe servir para que veamos a nuestro pasado, presente y futuro y ahondemos con criterio propio sobre el fenómeno migratorio, y seamos capaces de distinguir y saber quién necesita nuestra ayuda: si aquella persona que busca una vida digna para sí mismo y su familia o la que viene con dinero para comprar propiedades y especular con nuestra tierra y al que se le suelen abrir las puertas. Esperamos que el próximo año dicho evento se programe con tiempo y sirva para crecer en concienciación y solidaridad”.

Respecto a dicha nueva efeméride, la directora del Secretariado diocesano de pastoral de Migraciones, Loli López, ha dicho que “es estupendo todo lo que se haga por poner la mirada en las migraciones, poner las manos en la obra. Urge tanto desde las instituciones como desde la sociedad que atendamos más a las personas, tanto de las personas migrantes africanas como latinoamericanas, cuya realidad es más sangrante. Me alegra que se avance en un plan estratégico y crecer en concienciación, pero es más necesario crear condiciones con más proyectos en los países de origen. Se trata de crear de verdad estructuras de convivencia, superando las de coexistencia”.