El FSI refuerza su colaboración con los trabajadores del sur

Aunque la pandemia fue un momento de complejidad para los proyectos financiados por el Fondo de Solidaridad Internacional (FSI) de la Hermandad Obrera de Acción Católica (HOAC), poco a poco, se va retomando el ritmo y llegan nuevas propuestas. Aumenta el empobrecimiento en los países del Sur, golpeando con especial intensidad a los colectivos más vulnerables, mujeres y migrantes.

En la asamblea general del pasado año la HOAC decidió ampliar los fines del fondo y abrirse a nuevos aspectos del apoyo a entidades que colaboran en países en desarrollo. Junto con la formación, el apoyo a las luchas de la clase obrera y el apoyo a actividades que fomenten el trabajo decente han pasado a ser aspectos claves del sentido de esta herramienta de fraternidad universal.

Gracias a los proyectos presentados, conocemos mejor las dificultades en el ámbito laboral de las personas trabajadoras de los países empobrecidos, para poder tenerlas presente en las decisiones que tomamos cada día, sobre todo, a nivel político y de consumo.

Algunos de los proyectos aprobados en este año son continuidad de lo ya trabajado anteriormente como los que llegan del movimiento de trabajadores de la India, de la CIJOC y de Contexto de Bolivia, mientras que otros reciben apoyo por primera vez con el mismo fin, fortalecer la justicia social ante la necesidad de extender el cuidado del trabajo y aumentar el respeto por la dignidad de las personas trabajadoras.

Este año, iniciamos la colaboración con las entidades de trabajadores cristianos que promueven la autonomía de las mujeres del asentamiento humano de Bocanegra, en la Región del Callao (Perú). Desde el año 2000, la actividad económica de las mujeres se ha visto muy afectada por las autoridades, en muchos casos, procesadas por delitos de corrupción.

Los banquitos comunales de Bocanegra tienen una estructura organizativa que promueve la participación de las mujeres reconociendo sus derechos y su autonomía.

Para ello realizan talleres de capacitación, escuela de formación sobre derechos laborales y desarrollo emocional personal, con el fin de facilitar el acceso a sus derechos y al mercado laboral sin tener que sucumbir a intereses partidistas de otras personas más poderosas. Para ello, el FSI de la HOAC dedicará en 2024 unos 6.000 euros.

Igualmente, el movimiento de trabajadores campesinos de Guatemala ha solicitado ayuda para fortalecer el cumplimiento de los derechos y la economía comunitaria de San Marcos. Aunque el proyecto en sí arrancó en 2020, ahora han solicitado financiación de la HOAC para los próximos tres años, en concreto, con vistas a fomentar la organización de líderes y lideresas comunitarios para la defensa de los derechos humanos, laborales y ambientales, comprometidos con la democracia, la cultura de la justicia, así como la paz y armonía con la madre tierra. Está previsto un desembolso de 7.000 euros.

Se inicia la colaboración con pequeños talleres prácticos de costura y peluquería para chicas en dificultades y en riesgo de la calle en la ciudad de Douala, capital económica de Camerún.

Se trata de una ciudad con un alto índice de paro o contrataciones muy precarias que favorecen la concentración de habitantes en los barrios periféricos, generando problemas sociales de todo tipo y grandes bolsas de pobreza.

Las Misioneras Cruzadas de la Iglesia llevan muchos años trabajando en Camerún, su labor ha consistido en proporcionar recursos para el crecimiento personal y la transformación social.

La aportación de más de 7.000 euros servirá para promover a los y las mejores jóvenes que han terminado su formación profesional, pero que, cuando encuentran un trabajo, no reciben salarios dignos y se sienten explotados.

Con los talleres, se les ofrece una oportunidad de tener una autonomía laboral que les permita apartarse de esas situaciones de infravaloración que están viviendo para abrazar el mundo de trabajo de forma digna.

La larga trayectoria de colaboración con la Coordinadora Internacional de Jóvenes Cristianos continúa este año con un proyecto para empoderar a los jóvenes que enfrentan el desempleo y la migración en África Oriental, dotado de 8.500 euros.

En concreto, el programa de capacitación abarca a 30 jóvenes líderes y algunos capellanes que tratan de crear conciencia, asumir responsabilidades y organizar la acción. La colaboración permitirá la sensibilización y la acción hacia el cambio climático, la atención a la migración interna y externa, el desempleo y la asunción de responsabilidad y compromiso social a largo plazo.

La organización Contexto vuelve a recibir apoyo para la formación socio-pastoral y liderazgo con enfoque en derechos laborales y prevención de la violencia de género para mujeres indígenas, durante este y el año siguiente por un montante de 13.349,26 euros.

Gracias a los proyectos presentados,
conocemos mejor las dificultades
en el ámbito laboral de las personas
trabajadoras de los países empobrecidos

En el trabajo que viene realizando Contexto se une fe y vida donde la formación socio pastoral es una formación integral en ámbitos cognitivos, psicoafectivos, familiares, sociales y espirituales.

Actualmente se cuenta con la participación de mujeres líderes, jóvenes líderes y autoridades locales indígenas originarias para la formación socio pastoral desde la Doctrina Social de la Iglesia y el Evangelio, contemplando a Jesucristo Obrero y su trabajo por la justicia social.

El Movimiento de Trabajadores Cristianos (MTC) de la India promueve la autoayuda en mujeres en habilidades para la creación de empleo. La organización india reúne a militantes que aplican el método de revisión de vida abierto a simpatizantes que compartan sus reflexiones. Además, se acerca a las diócesis para preparar distintos proyectos de capacitación donde, en gran parte mujeres, reciben formación práctica y de desarrollo de la autoestima para la ejecución de distintos proyectos laborales que les permitan conseguir cierta autonomía. Este proyecto cuenta con una aportación del FSI de casi 7.500 euros.

Muchas mujeres se ven solas en casa con sus hijos porque sus maridos se van a trabajar a otros países, viéndose obligadas a trabajar en la economía informal. Los miembros del MTC acompañan a estas mujeres para que puedan acceder a la formación y a préstamos bancarios que les permitan abrir sus propios negocios o acceder a un mercado de trabajo formal donde sean reconocidos sus derechos y puedan acceder a un trabajo digno.

De nuevo en Bolivia, pero ahora a través de la Fundación Taller de Solidaridad, se financia con más de 14.000 euros un proyecto para el empoderamiento de las mujeres en su vida familiar y social, desde el enfoque de género en el desarrollo en dos barrios de Uspha-Uspha; Cochabamba.

El proyecto se centra en promover el empoderamiento de las mujeres, reconociendo su participación como ciudadanas, permitiendo participar en un contexto de igualdad en el acceso a recursos y en la toma de decisiones. Para ello ofrecen formación en temas de derechos humanos, derechos de las mujeres, habilidades comunicativas, legislación y métodos de participación a nivel social y laboral.

Finalmente, el MTC de Colombia ha pedido colaboración por valor de 3.000 euros para ayudar con la formación de militantes y la organización de su asamblea nacional de delegados en noviembre de 2024.

La organización de trabajadores cristianos colombianos lleva a cabo acciones de capacitación de sus militantes para que sean formadores de las personas trabajadoras. La próxima reunión se centrará en las reformas de pensiones y laboral, con el método de revisión de vida, basándose en los cuadernillos publicados por la HOAC. Aprovecharán, también el encuentro, para realizar su asamblea con una lectura crítica de la realidad social y laboral. •

Marimar González Gómez

Responsable general de Compromiso y Relaciones Internacionales de la HOAC