Àlvar Miralles reflexiona sobre como orar en verdad el Padrenuestro nos lleva a hacernos cargo de nuestra propia precariedad y
Àlvar Miralles
Cuántas cosas sabemos, nos enseñan, ocupan nuestro tiempo, diría nombres de algunos jugadores, los años de la reina… Pero todavía
I Vamos a arriesgarnos, a obedecer al Evangelio, pasemos la prueba del dolor, –no importa si es poca la fe
Señor, la gente crítica no aparece en los programas de debate, vetados son, me dicen, por orden del mercado. Allí
Tú, que has hecho la opción por los pobres, que quieres ser cristiano de verdad, di a Jesús: —«Señor mío,
Ve Jesús a los «humanos» sometidos y sumisos, pero alegres por las cadenas de oro que rodean sus cuerpos. Pobres
Hubo un tiempo, pues, en que el amor afectaba a las riquezas. ¡Qué tiempos bárbaros aquellos! El rico decía: «Vale
Hambriento de Evangelio, sediento de verdad camina con su manto de sentido común. ¡Cuántos, oh Dios! sin perro que les
No quiso dejarnos Jesús su ropa bendecida, por su piel Con ella pagó los gastos de su última enseñanza, De
Los suyos, los de su pueblo… se escandalizan de Jesús. ¿Cómo es posible que ese «obrero manual», ese hijo de