El papa León XIV llama a redoblar los esfuerzos contra la siniestralidad laboral, como servicio a la vida

El papa León XIV llama a redoblar los esfuerzos contra la siniestralidad laboral, como servicio a la vida
El papa León XIV, en su discurso ante la Asociación de Consultores Laborales de Italia, ha hecho un nuevo llamamiento para reforzar las medidas de prevención de accidentes laborales, con el fin de evitar que los espacios de trabajo se transformen “en lugares de muerte y desolación”.

En un encuentro con representantes de las entidades de asesores laborales de Italia –organismos que orientan a las compañías e intermedian con sus empleados– León XIV se ha dirigido a estos especialistas en derecho laboral, seguridad social y recursos humanos, con el motivo del aniversario de su reconocimiento legal.

En su alucoción les ha exhortado, además, a proteger la dignidad humana y actuar con especial sentido de la justicia con las personas trabajadoras.

Con gran énfasis, el Papa les ha animado promover la seguridad en el trabajo, subrayando su responsabilidad en la prevención de accidentes, mediante la formación y sensibilización, que el pontífice entiende como “un servicio a su propia vida”. En este sentido, ha recordado que “”prevenir es mejor que curar”.

También se ha lamentado de la persistencia de la siniestralidad laboral:

“Por desgracia, todavía hoy son demasiados los accidentes y las “muertes blancas” que ocurren en los lugares de trabajo”.

Así, ha denunciado que “aquellos que deberían ser siempre espacios de vida —donde las personas pasan cada día gran parte de su tiempo y emplean una gran porción de sus energías— con frecuencia se transforman en lugares de muerte y desolación”.

En este punto, ha recordado las palabras del papa Francisco a la Asociación Nacional de Trabajadores Mutilados e Inválidos del Trabajo, 11 de septiembre de 2023, cuando proclamó que “la seguridad en el trabajo es como el aire que respiramos: nos damos cuenta de su importancia solo cuando falta trágicamente, ¡y siempre es demasiado tarde!”

Igualmente, ha reconocido la mediación profesional de estos profesionales que les convierte en “bisagra de conexión entre las figuras directivas y los empleados”, capaces de facilitar “relaciones indispensables tanto para el buen funcionamiento de las empresas como para el bienestar de quienes trabajan en ellas”.

No ha dejado pasar la ocasión de comentar “dos tentaciones” que, a su juicio, deberían evitar: “una excesiva burocratización de las relaciones” y “el alejamiento y la desconexión de la realidad”.

Ambas, ha proseguido, “son dañinas, porque a la larga hacen inviable el ambiente empresarial, impidiéndole ser, según su vocación más auténtica, una sinergia solidaria”.

La persona por encima del capital

El papa León XIV ha señalado que “en cualquier dinámica laboral” no debe anteponerse “ni el capital, ni las leyes del mercado, ni el beneficio” por delante de “la persona, la familia y su bien”, respecto a los cuales “todo lo demás es funcional”.

Esta aseveración es una centralidad constante en la Doctrina Social de la Iglesia, que “debe mantenerse presente en toda programación y diseño empresarial, para que los trabajadores y trabajadoras sean reconocidos en su dignidad y reciban respuestas concretas a sus necesidades reales”.

Es también, según ha recordado, herencia del pensamiento de Francisco, quien afirmó que “trabajando nos hacemos más personas, nuestra humanidad florece, los jóvenes se convierten en adultos”, una cita incorporada, a la exhortación apostólica Dilexi te.

Con ello, León ha invitado a “atender las necesidades de las familias jóvenes, de los padres con hijos pequeños”, y de “ayudar a quienes, aun trabajando, deben cuidar de familiares ancianos o enfermos”.

“Se trata de necesidades que ninguna sociedad verdaderamente civilizada puede permitirse olvidar o descuidar, y vosotros tenéis la posibilidad de sostener a quienes luchan por afrontarlas”, les ha dicho a los asesores laborales, remarcando la complejidad de la época actual, en la que “la tecnología y la inteligencia artificial gestionan y condicionan cada vez más nuestras actividades”.

Velar para que las empresas sean comunidades fraternas

Ante esta situación, León XIV considera “urgente comprometerse para que las empresas se caractericen, ante todo y sobre todo, como comunidades humanas y fraternas”, por lo que anima a estos profesionales de las relaciones laborales a cumplir su función “con pasión y dedicación, conscientes de que muchos hermanos y hermanas cuentan con vuestra contribución para desempeñar serenamente sus actividades laborales”.

Ha concluido su mensaje apelando a la intercesión de la Bienaventurada Virgen María y de San José, Patrono de los trabajadores, para luego impartir de corazón su bendición apostólica con sus mejores deseos para una Santa Navidad.