“La flotilla no se toca y la luz es un derecho”
Hoy, 2 de octubre 2025, las vecinas y los vecinos de La Cañada Real cumplimos cinco años sin luz.
Cinco años desde que la administración y la empresa Naturgy decidieron condenarnos a la oscuridad.
Nunca pensamos que llegaríamos a este punto.
Niñas y niños que han crecido estudiando a la luz de la vela.
Ancianos que pasan en invierno entre mantas.
Personas enfermas sin la posibilidad de enchufar una máquina que les dé vida.
Hoy también en otro lugar del mundo, la flotilla que navegaba hacia Gaza para llevar ayuda humanitaria y abrir un corredor de ayudas ha sido detenida.
No la dejan llegar a su destino, no la permiten llevar lo más básico a un pueblo que resiste bajo bloqueo y genocidio.
Dos historias distintas, pero un mismo patrón.
Los poderosos que deciden sobre la vida de los más vulnerables que cortan la luz, que bloquean los alimentos, que impiden la dignidad y que matan a las personas, son los que deciden.
Desde La Cañada Real hasta Gaza compartimos la misma oscuridad impuesta, pero también compartimos la misma luz que no se puede cortar.
La de la resistencia, la de la solidaridad, la de la vida que sigue adelante aunque ellos la quieren apagar.
Por eso, las mujeres de Tabadol queremos salir a las calles y gritar al mundo entero que la flotilla no se toca y que la luz es un derecho.
Presidenta de la asociación cultural Tabadol y activista por los derechos humanos en la Cañada Real.
