Elvira Gómez, barrendera en Terrassa: “No puede ser que muera gente por ganar un sueldo”

La muerte de la barrendera de Barcelona, Montse, tras haber cumplido su jornada a altas temperatura le convenció de que no podía seguir callada. Así que abrió una recogida de firmas por internet para reclamar la adaptación automática de las condiciones de trabajo de la limpieza viaria durante las olas de calor.
Elvira Gómez, barrendera en Terrassa, ha recopilado ya más de 50.000 adhesiones a su petición al Gobierno de España para que fije por ley la temperatura máxima a la que se puede trabajar al aire libre y la reducción de jornada sin pérdida salarial para combatir el calor extremo.
“Sólo estoy pidiendo que la gente que trabajamos al sol no tengamos que morir por conseguir un sueldo”, comenta esta trabajadora de la limpieza viaria, que insiste en que “el calor extremo no es una incomodidad, es un riesgo real”.
“Ya ha habido muertes por golpes de calor en el trabajo al aire libre en ciudades como Madrid, Sevilla, Córdoba, Móstoles y, recientemente, en Barcelona”, justifica en Change.org, donde ha alojado la recogida de firmas.
“Llevaba tiempo pensando que hay que mejorar el protocolo, pero cuando la semana pasada vi que había muerto Montse en Barcelona, decidí hacer algo ya”, confiesa.
“Aun así, no existe una ley que limite la temperatura máxima para trabajar en exteriores”, continúa.
El Real Decreto RDL 4/2023 solo obliga a tomar medidas adaptivas a partir del nivel naranja que se activa a partir de los 39 grados de temperatura. “Trabajar al sol con 38, e incluso con 33, ya aumenta los riesgos, porque una cosa es el termómetro y otra la sensación térmica”, explica.
Elvira afirma que “en interiores, en oficinas, la temperatura máxima a la que se puede trabajar es a 27 grados, pero al aire libre no se especifica nada, más allá de los 39. Lo que digo es que las personas que trabajamos al sol también merecemos protección”.
Montse no murió en vano: alzar la voz tras la tragedia
Esta barrendera lleva siete años en la empresa municipal dedicándose a la recogida de basura, a vaciar los contenedores, y tres limpiando la ciudad, en el turno de tarde. Reconoce que este año no se han registrado incidentes en la plantilla por calor, al menos que le hayan contado, aunque otros años sí que ha habido compañeros o compañeras que han tenido que “llamar a la ambulancia o a urgencias”.
Más que centrar la atención en lo que ocurre en su empresa, Elvira reclama mayor reconocimiento de lo que supone trabajar con temperaturas extremas y más sensibilidad de quienes organizan tareas que exigen un gran esfuerzo físico como la limpieza urbana.
“Hay gente que nos suelta que toda la vida en el campo se ha trabajado al sol o que busquemos sombras y nos apañemos. Por supuesto, que tratamos de evitar la exposición al calor”, pero, se pregunta, “¿qué pasa si estás en un polígono o en una zona donde no hay árboles, ni lugares para beber agua o descansar al fresco?”
Sus propios compañeros y compañeras de la empresa le han agradecido la recogida de firma y aunque en los comentarios por internet hay de todo, Gómez se queda con las muestras de apoyo y comprensión. “No todo es esa gente que parece que nos quiere como esclavos, también hay personas comprensivas, como muchos camareros que nos ofrecen agua fría cuando nos ven barrer”.
La empresa encargada del servicio en Terrassa cuenta con un comité de empresa y con delegados de prevención que llevan años intentando mejorar las condiciones y llamando la atención sobre los riegos laborales especialmente ahora que parece que “el calor no se va a ir, sino que cada año se supera”.
“Hemos conseguido que en verano nadie trabaje solo, es importante que si te pasa algo recibas atención inmediata. Aunque la vestimenta es mejorable, algo se ha avanzado”, relata, aunque “más expuestos”.
Eso sí, “lo jodido es estar barriendo bajo el sol”, exclama. Por eso, pide “adaptar los horarios y si llega el caso reducir la jornada”, porque lo que no puede ser es lo que le ha pasado a la barrendera de Barcelona, o le ocurrió a José Antonio en Madrid.

Redactor jefe de Noticias Obreras