La Economía Social y Solidaria avanza en el cumplimiento de sus principios

La Economía Social y Solidaria avanza en el cumplimiento de sus principios
La última auditoría social de la Red de Redes de Economía Alternativa y Solidaria (REAS) muestra una evolución positiva en los indicadores de cumplimiento de sus compromisos con la calidad del empleo, la equidad, la responsabilidad social y laboral, y la participación de la mujer en sus organizaciones.

Las entidades asociadas presentan ingresos totales de 1.307,4 millones de euros, empleando directamente a más de 22.000 personas y contando con 36.000 voluntarias. A finales de 2024, 1.028 entidades (cooperativas, asociaciones, empresas de inserción, etc.) estaban asociadas a las redes de REAS RdR en todo el Estado, dedicadas a diversas actividades económicas dentro de las redes territoriales o sectoriales.

El Informe de la Economía Social y Solidaria 2024, en su décima edición, mide la coherencia entre los principios y la práctica empresarial de las 685 empresas analizadas, 44 más que en 2023, de las cuales el 82% están asociadas a las redes territoriales y sectoriales de REAS RdR, y el 18% restante son empresas sociales y solidarias que participan en los mercados sociales.

El ingreso total de las entidades que han ofrecido sus datos suma los 861  millones de euros, 62 más que el año pasado, mientras que los gastos ascendieron a 841 millones. Con todo, el porcentaje de entidades que terminaron el año con un resultado económico anual negativo fue del 20,28%.

El tamaño promedio de las organizaciones es de 321 personas implicadas y 29 trabajadoras, aunque la mediana, que ofrece una tendencia central menos afectada por valores atípicos, es de 25 personas implicadas y seis trabajadoras. En total, las entidades que aportaron datos a la Auditoría Social de REAS RdR empleaban a más de 20.000 personas en 2023, con un 66% de trabajadoras mujeres y un 20% de trabajadoras socias de la entidad.

Además, las entidades vinculadas a estas organizaciones incluyen 165.000 personas asociadas no trabajadoras, más de 29.000 voluntarias, casi 5.000 representantes de organizaciones y más de 500 patronas de entidades. En total, 210.000 personas están relacionadas con las 685 entidades que respondieron a la Auditoría Social, aunque esto representa un descenso respecto al informe anterior, debido a la ausencia de datos de una gran entidad estatal.

Actualmente, REAS RdR está compuesta por 15 redes territoriales y cinco redes sectoriales, incluyendo la Asociación Española de Recuperadores de Economía Social y Solidaria (AERESS), la Mesa de Finanzas Éticas, la Red Unión Renovables, la Coordinadora Estatal de Comercio Justo (CECJ) y los Supermercados Cooperativos.

En cuanto a la distribución sectorial, casi el 20% de las entidades se dedican a la educación, el 14% a los cuidados, el 10% al asesoramiento y el 7% a la alimentación. Otros sectores incluyen vivienda y gestión del entorno (9%), cultura y ocio (9%), comunicación (8%) y espacios y redes (5%), además de empresas dedicadas al textil, tecnología y electrónica, restauración y hostelería, financiación y monedas sociales, suministros y productos manufacturados.

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La auditoría social, presentada bajo la etiqueta “#NosMostramosComoSomos!” desde la aprobación de la Carta de la Economía Solidaria en 2022, evalúa el cumplimiento de seis principios: equidad, trabajo digno, sostenibilidad ecológica, cooperación, reparto justo de la riqueza y compromiso con el entorno.

En cuanto a las condiciones de trabajo, el 53,26% de las entidades cuentan con un reglamento interno que mejora las condiciones laborales establecidas en el convenio de aplicación, y el 73,95% contempla mejoras en los permisos de conciliación laboral. Un 80,9% dispone de espacios de atención emocional y cuidado de las trabajadoras, y el 81,91% tiene medidas activas para la promoción de la salud en el marco de la prevención de riesgos laborales.

La mayoría de las entidades (97,31%) fomenta la formación de sus empleados, con un 20% adaptando los horarios para facilitarla. Más de la mitad (53,45%) ofrece horas de formación en horario laboral y ayuda a cubrir los costos, aunque un menor porcentaje (23,87%) solo dispone de horas de formación o ayuda a cubrir los costos.

La diferencia salarial en el conjunto de las entidades de la economía social y solidaria arroja una media de 1 a 1,74 entre el salario más alto y más bajo, con un 67% de mujeres en puestos de responsabilidad y un 98% de entidades utilizan un lenguaje no sexista.

En cuanto a la sostenibilidad ecológica, el 95% de las organizaciones aplica criterios de consumo responsable en la adquisición de productos; un 75% toman medidas para reducir y/o compensar la huella ecológica en la actividad económica y el 54% usa energía 100% renovable.

El 94% de las empresas cooperan dentro de su mismo sector; el 68% operan con finanzas éticas y un 11,6% realiza sus compras dentro de la Economía Social y Solidaria.

Sobre el reparto de la riqueza, hay que destacar que el 57% de los ingresos procede de facturación frente a un 33% que proviene de subvenciones. El 66% de los beneficios se destina a reservas, compensación de pérdidas o inversiones propias, el 14% a iniciativas para la construcción de bienes comunes y un 5% a inversiones de entidades financieras de la economía social y solidaria.