Trabajo presenta su plan de apoyo a las pequeñas empresas, sin lograr avances hacia la reducción de jornada
El Ministerio de Trabajo y Economía Social ha entregado a los agentes sociales su propuesta de bonificaciones, incentivos y apoyo a las pequeñas empresas durante la implantación de la jornada laboral de 37,5 horas prometida y ha anunciado la creación de un grupo de expertos para mejorar el control de las horas de trabajo.
Así lo ha confirmado el secretario de Estado de Trabajo, Joaquín Pérez Rey, tras la nueva reunión de la mesa de diálogo social que ha terminado sin que las partes negociadoras hayan variado su posición
Las organizaciones sindicales han vuelto a pedir al Gobierno que asuma su responsabilidad y cumpla con sus compromisos de acometer la reducción de la jornada máxima de trabajo, además de avanzar en la regulación del registro horario y la desconexión digital.
Tampoco hay indicios de que la patronal haya salido de su inmovilismo. Sus representes en la mesa de negociación no comparecen antes los medios de comunicación al término de estas reuniones, pero por lo adelantado por el presidente de la CEOE siguen sin entrar a debatir como aplicar en los centros de trabajo la reducción horaria.
Según las declaraciones del secretario de Estado, Pérez Rey, el llamado “Plan Pyme 375” contempla bonificación a la conversión de contratos a tiempo parcial en empleos a tiempo completo en empresas de menos de 10 trabajadores en párelo a la entrada en vigor de la limitación horaria y planes de asesoramiento y guías sectoriales que tengan en cuenta las características de cada sector de producción,
El secretario de Estado de Trabajo ha afirmado que buena parte de las empresas pequeñas, especialmente del sector del comercio o de la hostelería, tienen mucha contratación a tiempo parcial, “por lo tanto, tienen un margen más que importante para incrementar la jornada como consecuencia de la reducción de jornada. Esto hace que la reducción de jornada no sólo puede ser una oportunidad para crear más empleo, sino que, además, es una buena oportunidad para dejar atrás los trabajos a tiempo parcial de corta duración”.
También ha reiterado su esperanza en llegar a un acuerdo con los agentes sociales para la reducción de jornada y les ha pedido expresamente que planteen sus consideraciones sobre el plan de acompañamiento a las PYME.
Por su parte, la secretaria de Acción Sindical de CCOO, Mari Cruz Vicente, ha lamentado no poder comentar el plan presentado por el ministerio al haberlo recibido al final de la reunión, al tiempo que ha instado al Gobierno a que acometa la reducción de la jornada de trabajo, después de haber “sobrepasado los nueve meses de negociación sin que haya habido avances”. Igualmente ha expresado la conveniencia de “ir pensando en acabar con este proceso”.
“El gobierno tiene que actuar”, ha afirmado, para modificar el artículo 34 del Estatuto de los Trabajadores que establece la jornada máxima de trabajo.
Sin mencionar expresamente a las organizaciones empresariales, aunque en clara referencia a ellas, ha pedido dejar que “la negociación colectiva que juegue su papel”, gracias al cual la jornada media anual pactada por convenio en nuestro país es de 38,4 horas a la semana.
No obstante, ha explicado que la finalidad del cambio legislativo es conseguir que “todas las personas trabajadoras tengamos los mismos derechos reconocidos”, independientemente de que esté afectas por un convenio colectivo.
En este sentido, su compañero Fernando Luján, vicesecretario General de Política Sindica, ha recordado que los convenios colectivos no establecen la limitación del tiempo de trabajo, fijada en el Estatuto de los Trabajadores, sino solo la distribución de jornada.
Luján ha cargado contra quienes reclaman el cumplimiento de los convenios, pero no el de la jornada. En España se realizan unos tres millones de hora extras a la semana que “ni se abonan, ni cotizan”, por lo que ha vuelto a exigir al Gobierno que cumpla con su responsabilidad de velar por el cumplimiento de la ley y mejorar el control horario, sin esperar a legislar la rebaja del tiempo de trabajo.
“Si las posiciones siguen tan inamovibles, cada cual debe asumir las responsabilidades que tiene”, ha reiterado Luján, y ha detallado que las organizacione sindicales seguirán su proceso de movilizaciónes y trasladarán a la opinión pública cuáles son las necesidades de la población trabajadora y sus propuestas para mejorar la productividad de las empresas.
Redactor jefe de Noticias Obreras