UGT pide encarecer el despido para que deje de ser parte de la gestión “normalizada” de las empresas
El sindicato UGT ha vuelto a insistir en la necesidad de que el despido deje de ser considerado “una técnica de gestión normalizada” y ofrezca mayor seguridad a la persona trabajadora, por lo que propone recuperar la indemnización de 45 días de salario por año trabajado, con un mínimo de seis meses con independencia de la antigüedad.
En esta misma línea, reclama también recuperar los salarios de tramitación. “Recuperar la seguridad en el trabajo, huir de la arbitrariedad de los despidos que sin causas objetivas se producen es una cuestión fundamental en estos momentos”, ha reivindicado el secretario general de UGT, Pepe Álvarez, durante la presentación de un informe sobre el coste del despido sin causa justificada.
“No es cierto que en España sea más caro despedir que en el resto de los países OCDE”, ha asegurado el vicesecretario general de Política Sindical de UGT, Fernando Luján, quien ha utilizado el índice que elabora la propia OCDE, para indicar que la protección del despido individual ha pasado de un 3,55 sobre 5 en 1985 a un 2 en el momento actual.
El estudio refleja que la indemnización media por despido es de 9.512 euros, aunque para los trabajadores con contrato temporal la media es de 1.500 euros y para quienes tienen contrato a tiempo parcial o fijo discontinuo la cantidad ronda los 4.500 euros.
Además, el sindicato ha advertido de la brecha existente en la protección frente al despido que sufren mujeres y jóvenes: las personas trabajadoras de entre 20 y 24 años reciben una indemnización media de 1.158 euros para los hombre y de 907 para las mujeres, mientras que quienes tienen 55 o más años perciben 23.885 euros, en el caso de los hombres y 17.687 euros en el caso de las mujeres.
La investigación sobre el despido, a cargo de la Universidad de Jaén en colaboración con la Universidad Autónoma de Madrid, señala que las recisiones de contrato sin causa y por decisión unilateral de la empresa alcanzan, al año, el medio millón. De ahí que concluya que el despido improcedente “se ejerce de forma nada infrecuente de modo arbitrario” y que “el despido en general aparece extremadamente normalizado”.
La organización de trabajadores entiende que el sistema legal de protección frente al despido individual es “disconforme” con la Carta Social Europea y “manifiestamente ineficaz” para cumplir la doble función de protección, es decir, resarcir al trabajador y disuadir a la empresa. A sui juicio, el sistema “ni es eficaz, ni es equitativo, ni es válido”.
Por ello, UGT propone la recuperación de los salarios de tramitación, fijar una indemnización básica de acuerdo a la legislación anterior a la reforma laboral de 2012 para incorporar un mínimo de 6 meses de salarios con independencia de la antigüedad, e incluir la posibilidad de una indemnización adicional según los daños al trabajador “que garantice el resarcimiento suficiente y el efecto disuasorio efectivo”.
“Es fundamental la recuperación de los salarios de tramitación, en ningún caso el periodo despido hasta la resolución judicial es responsabilidad trabajador”, ha afirmado Álvarez, que entiende que “no puede ser el trabajador el que tenga que cargar con las consecuencias del despido”. Del mismo modo, la central sindical exige que sea el trabajador el que, en caso de que un juzgado declara improcedente un despido, elija entre cobrar una indemnización o ser readmitido en su puesto de trabajo, una facultad que en este momento corresponde a las empresas.