La frase con la que encabezamos la presente reflexión, y que podríamos traducir en castellano como “meterse en el fango”, la solemos utilizar los valencianos cuando nos referimos a alguien
La frase con la que encabezamos la presente reflexión, y que podríamos traducir en castellano como “meterse en el fango”, la solemos utilizar los valencianos cuando nos referimos a alguien