Hace unos días, cuando esperaba con cierta ansiedad la salida de mi equipaje en las cintas transportadoras del aeropuerto, captó mi atención un niño de unos dos años que no
José María Toro Alé
Hace años, mientras vigilaba el patio de recreo, escuché como algunos de mis alumnos conversaban animadamente con niños de otras clases y les decían: –Nuestro maestro nunca nos riñe. Sorprendidos
Tenemos que empezar a mirar la etapa vital de la adolescencia con otros ojos. Cuando nos referimos a otros momentos vitales, de inmediato destacamos los valores positivos asociados a ellos,
Cuando describimos las distintas edades, solemos hacerlo desde una visión, diríamos, lineal e incluso materialista, con una mirada que se me antoja limitada y que, al mismo tiempo, nos limita.
No hace mucho tiempo, en más de una ocasión, maestros y padres proclamaban que «a base de palos se aprende». Pero lo que más se repetía era el muy conocido
«Basta un minuto para incentivar a un niño o para desanimarlo, de por vida». Escribo estas líneas un 20 de noviembre, en el día internacional dedicado a la infancia en
Queridos corazones humanos: Como cada otoño, las hojas de muchos árboles iniciamos, en este escenario estacional, la danza sublime y silenciosa del soltar. Sí, sí…, del soltar, porque no olvidéis
El puente es algo más, mucho más que una mera edificación práctica o una construcción utilitaria. El puente es un “símbolo” que nos habla sobre la “evolución social y el
Padre y Maestro silencio nuestro que estás en el fondo de los corazones. Santificada sea tu Presencia. Venga a nosotros la fragancia y el aroma de tu paz. José
Las perversiones del ámbito del trabajo se proyectan también en el hábito del descanso, dicho de otra manera, nuestras «vacaciones» pueden ser una simple reverberación, un reflejo, una reproducción del