Trabajadoras y trabajadores cristianos de Canarias advierten que la especulación urbanística “ha convertido la vivienda en un factor de exclusión”

La Hermandad Obrera de Acción Católica (HOAC) de Canarias alerta de que más de 211.000 viviendas vacías conviven con la imposibilidad de emancipación de las personas jóvenes y un aumento del 68% en los alquileres en una década. Reclama medidas urgentes para garantizar el acceso a la vivienda ante la “especulación que asfixia a la población trabajadora”
El movimiento de la Iglesia diocesana ha exigido a las instituciones públicas la adopción “de medidas urgentes” que atajen de raíz la creciente inaccesibilidad a la vivienda, un problema que califica como uno de los más graves de la vida social canaria y directamente vinculado a la especulación urbanística.
En su asamblea diocesana del 15 de noviembre, la organización de trabajadoras y trabajadores cristianos afirmó que esta crisis está golpeando de lleno al mundo del trabajo, a las familias con menos recursos y a las generaciones jóvenes, atrapadas —dicen— en un presente sin expectativas reales de autonomía.
“Más de 211.000 viviendas permanecen vacías, mientras unas 180.000 personas no tienen acceso real a una vivienda estable”, denuncia en su comunicado, al que se suma un dato especialmente preocupante: solo 2 de cada 10 jóvenes menores de 30 años con empleo han logrado emanciparse en Canarias. Los salarios bajos, la precariedad laboral y los alquileres “desorbitados” hacen, según este movimiento especializado de la Iglesia, “imposible iniciar una vida independiente sin endeudamiento”.
La organización de la Iglesia diocesana recuerda que la pobreza y la exclusión social afectan ya al 31,2% de la población canaria, unas 700.000 personas, y que “uno de los factores cada vez más determinantes en la exclusión y la pobreza es la vivienda”. En los últimos diez años, los precios del alquiler en las islas han aumentado un 68%, casi el doble que el incremento medio estatal (39%).
Vivienda vacacional, capital extranjero y ausencia de planificación
El movimiento cristiano señala tres fenómenos que agravan la situación: la falta de control sobre la vivienda vacacional, la compra masiva de inmuebles por parte de capital extranjero y la especulación urbanística. La explotación intensiva del alquiler vacacional “aumenta los precios del alquiler tradicional, ya que las personas propietarias buscan maximizar sus beneficios”, denuncian. En un territorio limitado como el archipiélago, estos factores “están causando un mal de gran magnitud a la población residente”, señalan.
Ante esta realidad, la HOAC subraya que la vivienda “requiere un enfoque integral y colaborativo orientado hacia el beneficio de la población residente y el desarrollo sostenible”. Solo con una acción pública “decidida y bien coordinada”, insiste, puede garantizarse un futuro habitable y justo.
En su comunicado, el movimiento obrero cristiano cita el reciente mensaje del papa León XIV con motivo de la Jornada Mundial de los Pobres, donde el pontífice afirmaba: “El trabajo, la educación, la vivienda y la salud son las condiciones para una seguridad que nunca se logrará con las armas”.
En este sentido, la organización de trabajadoras y trabajadores cristianos recuerda que estos derechos, junto a la salud, están recogidos en la Constitución y son indispensables para construir una sociedad “verdaderamente humana”. Por ello, insta a los poderes públicos a promover, con participación de las organizaciones sociales, un pacto integral por la habitabilidad, que permita a las personas y familias “vivir dignamente” y ponga freno a un modelo que “expulsa a la población trabajadora de su propio territorio”.

Director de Noticias Obreras.
Autor del libro No os dejéis robar la dignidad. El papa Francisco y el trabajo. (Ediciones HOAC, 2019). Coeditor del libro Ahora más que nunca. El compromiso cristiano en el mundo del trabajo. Prólogo del papa Francisco (Ediciones HOAC, 2022)



