Antonio J. Aranda: “La reducción de la jornada laboral es una medida que responde a la salud, el empleo y la vida familiar”

Antonio J. Aranda: “La reducción de la jornada laboral es una medida que responde a la salud, el empleo y la vida familiar”
El director del Departamento de Pastoral del Trabajo de la Conferencia Episcopal Española, Antonio J. Aranda, en conversación con NoticiasObreras.es, desgrana las prioridades para el curso 2025-2026 y los próximos años, marcados por una reflexión sobre las nuevas precariedades y el futuro de la pastoral del trabjao. Migrantes, mujeres y jóvenes, en el centro de la hoja de ruta pastoral

¿Cuáles son los planteamientos de fondo de los próximos años?

Estamos a la espera de que la Conferencia Episcopal apruebe las orientaciones pastorales para el próximo quinquenio y de que concluya el trabajo del denominado grupo de reflexión sobre el futuro de la Pastoral del Trabajo. A este grupo le hemos pedido un análisis de la sociedad y, más en concreto, del mundo del trabajo y de los retos que plantea a la Iglesia.

Con ambos documentos terminaremos de fijar nuestro plan de trabajo para los próximos años. Se trata de una reflexión sobre la situación del mundo obrero y sobre la Iglesia como sujeto evangelizador de esta realidad, implicando a diócesis y movimientos apostólicos.

Queremos potenciar el diálogo con sindicatos, empresarios cristianos y otras pastorales, como Migraciones y Ecología Integral

Entre las prioridades están también: retomar la colaboración con comunidades religiosas en barrios, potenciar los movimientos apostólicos en la evangelización del mundo del trabajo, reforzar el diálogo con organizaciones sindicales, abrir espacios de encuentro con empresarios y profesionales cristianos, e intensificar el trabajo transversal con Migraciones y Ecología Integral, además de continuar la buena experiencia compartida con Pastoral de la Salud.

¿Se incorporarán a las orientaciones pastorales de la Conferencia Episcopal?

Hasta abril de 2026 no se harán públicas las Orientaciones Pastorales para el próximo quinquenio. En ese momento conoceremos los objetivos y líneas de trabajo que se plantean y, desde el departamento, tendremos que adaptar nuestro trabajo para darles respuesta.

A principios de año se nos pidió a cada uno de los departamentos de la Pastoral Social que propusiéramos dos o tres líneas de acción para cada uno de los objetivos previstos en las orientaciones.

La Jornada Mundial por el Trabajo Decente del 7 de octubre abre el curso de convocatorias… ¿Cuáles serán las siguientes?

El 22 y 23 de noviembre celebraremos las XXXI Jornadas Generales de la Pastoral del Trabajo. En esta ocasión contaremos con Estrella Moreno, doctora en Teología de la diócesis de Bilbao, que nos ayudará a reflexionar sobre “La evangelización del mundo obrero en un cambio de época”.

El 8 de marzo y el 1º de Mayo, en coordinación con la iniciativa Iglesia por el Trabajo Decente, promoveremos actos en torno al Día de la Mujer Trabajadora y al Día de los Trabajadores.

El 25 de marzo tendremos una videoconferencia sobre “Familia y precariedad laboral”, y el 30 de mayo convocaremos el V Seminario Mons. Algora con el tema “Los movimientos y la evangelización del mundo obrero”.

Has citado las próximas jornadas de esta pastoral… ¿Qué cuestiones abordarán?

Estamos inmersos en una reflexión que nos ayude a definir y concretar los objetivos y tareas de la Pastoral del Trabajo en los próximos años. Estas jornadas quieren ser un primer encuentro para situarnos en esa reflexión.

Contaremos con la ponencia de Estrella Moreno, que nos ayudará a ubicarnos ante este cambio de época. También presentaremos una síntesis de las contestaciones a una encuesta que pretende tomar el pulso a la Pastoral del Trabajo en España.

Finalmente, abordaremos las orientaciones y los retos que encontramos para desplegar la Pastoral del Trabajo en las comunidades parroquiales.

¿Qué espera de estos procesos y cómo quiere implicar a las comunidades, movimientos, diócesis y otras pastorales?

El primer objetivo es tomar conciencia de la situación en la que vive el mundo obrero y descubrir los retos que esta realidad plantea a la Iglesia. El segundo objetivo es analizar la situación actual de la Iglesia y, desde nuestra realidad, ver qué respuesta evangelizadora podemos ofrecer al mundo obrero, así como los cambios personales y estructurales que debemos acometer para que esa respuesta llegue a sus destinatarios.

Analizar y marcar orientaciones para abordar las nuevas precariedades es nuestra prioridad, con especial atención a migrantes, mujeres y jóvenes

Queremos que esta reflexión sea lo más participativa posible. Se ha creado un grupo de reflexión para elaborar los análisis y propuestas necesarias. En un primer momento, hemos lanzado una encuesta para conocer la situación de diócesis y movimientos en relación con su tarea evangelizadora en el mundo obrero.

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En las jornadas de noviembre presentaremos el proceso que queremos seguir, reflexionaremos sobre fortalezas y debilidades de la pastoral, y definiremos formas de participación de diócesis y movimientos para el próximo año. Durante 2026 se abordarán cuestiones más prácticas que permitan concretar un plan de trabajo. En abril contaremos ya con las Orientaciones pastorales de la CEE, que nos servirán para poner nuestras tareas en sintonía con toda la Iglesia.

La reducción de la jornada laboral es un debate abierto en la sociedad, con resistencias políticas que frenan avances y derechos. ¿Qué lectura hacen de esta propuesta?

El Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia plantea la necesidad de que el descanso responda a las necesidades humanas: “El descanso festivo es un derecho. ‘El día séptimo cesó Dios de toda la tarea que había hecho’ (Gn 2, 2): también los hombres, creados a su imagen, deben gozar del descanso y tiempo libre para poder atender la vida familiar, cultural, social y religiosa” (n. 284).

¿Es suficiente el actual tiempo de descanso? A todas luces, no. Distintos expertos y organizaciones advierten de que los ritmos actuales de trabajo y las jornadas prolongadas repercuten en la salud de las personas trabajadoras y en el desarrollo de las familias.

Un 68% de la ciudadanía apoya la reducción de la jornada laboral: el Congreso debería escucharlo

En este sentido, también el papa Francisco, en un mensaje al IV Encuentro Mundial de Movimientos Populares, planteaba que “trabajar menos para que más gente tenga acceso al mercado laboral es un aspecto que necesitamos explorar con cierta urgencia. No puede haber tantas personas agobiadas por el exceso de trabajo y tantas otras agobiadas por la falta de trabajo”.

En este contexto, ¿qué les pide a las fuerzas políticas del Congreso?

Que escuchen a la ciudadanía: un 68% está de acuerdo con la reducción de la jornada laboral. Además, deberían tener presente la repercusión positiva que esta medida puede tener en la reducción del desempleo, en la salud de los trabajadores y trabajadoras y en el apoyo que supondría para las familias.