Iglesia y víctimas denuncian otra tragedia laboral en Jaén: “El trabajo es para la vida, no para la muerte”

La Pastoral del Trabajo, la HOAC diocesana y AVAELA claman justicia ante la muerte de un joven trabajador de 28 años en Guarromán: “No podemos acostumbrarnos”
La muerte de Juan Antonio, un joven trabajador, ha conmocionado a la localidad jiennense de Guarromán y ha supuesto un nuevo grito de denuncia pública sobre la siniestralidad laboral: una lacra intolerable.
La Pastoral del Trabajo, la Hermandad Obrera de Acción Católica (HOAC) de la diócesis de Jaén y la Asociación de Víctimas de Accidentes Laborales (AVAELA) han emitido un comunicado conjunto en el que exigen medidas urgentes para frenar lo que consideran “una tragedia social evitable”.
El joven falleció mientras trabajaba en la empresa MaxiMetal 2020, tras ser aplastado por un bastidor de 200 kilos.
“Era querido por todo su pueblo, por sus cofradías y compañeros de fútbol”, recuerda el comunicado. “Su muerte ha dejado un dolor inmenso en su familia, amigos y vecinos”.
Representantes de las tres entidades estuvieron junto a la familia en el tanatorio, en un gesto de consuelo y solidaridad. “En el abrazo mutuo Dios también se hace presente”, afirmaron.
El trabajo es para la vida
“Cada accidente laboral es un grito que clama justicia, un recordatorio de que el trabajo, que debería dar vida, no puede convertirse en causa de muerte”, interpela el texto del comunicado.
Las organizaciones recuerdan que esta tragedia no es un hecho aislado. Se suma a una larga lista de muertes “que se podían evitar, que hieren a familias, que empobrecen a toda la sociedad”, según denuncian, al tiempo que reclaman los “derechos fundamentales” a la seguridad y salud en el trabajo.
Además, citan la encíclica Laborem exercens de san Juan Pablo II, donde se afirma que los trabajadores tienen “derecho a ambientes de trabajo y a procesos productivos que no comporten perjuicios a la salud física de los trabajadores y no dañen su integridad moral” (n. 19).
“No podemos resignarnos a la indiferencia”
El comunicado alerta contra el riesgo de acostumbrarse a estas tragedias. “La seguridad en el trabajo es como el aire: solo se nota cuando falta, y cuando falta, ya es demasiado tarde”. Por eso, lanzan un llamamiento: “No podemos acostumbrarnos, ni resignarnos a la indiferencia. Cada accidente laboral es una llamada a despertar, a exigir que el trabajador y su dignidad estén siempre en el centro”.
Las entidades firmantes aseguran que “Dios no es indiferente ante el sufrimiento y la injusticia. Nosotros tampoco queremos serlo”.
En este sentido, se comprometen a seguir, “denunciando, acompañando y construyendo esperanza, para que ninguna familia más tenga que llorar una vida arrebatada en el trabajo. Porque el trabajo es para la vida, nunca para la muerte”, concluyen.

Director de Noticias Obreras.
Autor del libro No os dejéis robar la dignidad. El papa Francisco y el trabajo. (Ediciones HOAC, 2019). Coeditor del libro Ahora más que nunca. El compromiso cristiano en el mundo del trabajo. Prólogo del papa Francisco (Ediciones HOAC, 2022)