Iglesia y sindicatos condenan la ola de odio en Torre Pacheco y llaman a frenar la violencia y el racismo

Iglesia y sindicatos condenan la ola de odio en Torre Pacheco y llaman a frenar la violencia y el racismo
El obispo de Cartagena y los sindicatos CCOO y UGT han alzado la voz ante la escalada de violencia y los discursos de odio contra personas migrantes en Torre Pacheco. Reclaman serenidad, justicia y una respuesta firme para frenar las cacerías alentadas por la extrema derecha tras una agresión puntual que ha sido instrumentalizada para desatar el racismo.

El clima social en la localidad murciana de Torre Pacheco ha entrado en una fase crítica. Tras la agresión violenta —todavía sin aclarar— sufrida por Domingo, un vecino jubilado, se ha desatado una ola de hostigamiento y miedo. Grupos de extrema derecha, muchos llegados desde fuera de la región, han promovido concentraciones, discursos incendiarios y auténticas “cacerías” contra la población de origen magrebí, señalándola colectivamente como amenaza.

Ante estos hechos, CCOO de la Región de Murcia ha denunciado con contundencia la instrumentalización del suceso inicial para desatar una espiral de odio racial. “La intolerable agresión sufrida por un ciudadano de Torre Pacheco no puede justificar la ola de violencia ultraderechista incontrolada y desatada en esa ciudad contra la población magrebí”, manifiestan.

El sindicato alerta de que no solo se está atacando a personas concretas, sino a un colectivo clave para la economía regional, “se está agrediendo e intimidando a personas trabajadoras que tienen ya miedo de salir de sus casas a trabajar por si son linchados por turbas incontroladas […] Esto debe parar ya”.

A nivel nacional, CCOO ha exigido aplicar el marco legal vigente “con contundencia y agilidad” contra quienes difunden odio y falsedades, puesto que “la sociedad española no puede ni debe tolerar la propagación impune de estos discursos. Por ello, exigimos una respuesta institucional inmediata, ágil y eficaz para garantizar los derechos de las personas, asegurar la convivencia y perseguir a los responsables”.

Este sindicato propone una política de Estado coordinada en materia migratoria, que evite la irregularidad y la exclusión social, “a través de mecanismos ágiles y eficaces que promueva procesos migratorios con derechos y garantías que eviten situaciones de irregularidad y sobreexplotación”.

En la misma línea, UGT de la Región de Murcia ha condenado tanto la agresión al vecino como la posterior reacción de violencia racista, al tiempo que ha anunciado la convocatoria esta semana de una asamblea de delegados y delegadas en Torre Pacheco.

Según su secretaria general, Paqui Sánchez, el objetivo es “conocer de primera mano la situación de los trabajadores y trabajadoras, tanto migrantes como españolas, y tratar de calmar los ánimos y el clima de miedo que ahora mismo se percibe”.

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“Lo que no podemos consentir es que grupos políticos y antisistema de la derecha y ultraderecha utilicen las técnicas fascistas de violencia, odio y persecución a los más pobres e indefensos, con amenazas de expulsión y enfrentamientos cara a cara con cualquiera que sea extranjero” ha remarcado.

El sindicato pide a las autoridades continuar garantizando la seguridad ciudadana, pero también una respuesta política firme frente a quienes siembran el odio, condenando “la violencia en cualquier concepto, independientemente de quién la haga, pero también la que se siembra en las redes sociales o la que profieren partidos políticos de ultraderecha con intenciones populistas”.

El obispo de Cartagena pide paz, serenidad y perdón: “La violencia nunca arregla nada”

También el obispo de Cartagena, José Manuel Lorca Planes, ha hecho público un mensaje en el que expresa su “preocupación” por lo que está ocurriendo en Torre Pacheco.

El prelado ha pedido rechazar cualquier tipo de violencia “que nunca arregla nada ni es una solución de nada; al contrario, crea intranquilidad, y más en un pueblo que se ha distinguido siempre porque ha dado trabajo, por la convivencia y por la integración”.

El obispo ha agradecido el papel de la parroquia local y ha alentado a la ciudadanía a no dejarse arrastrar por la confrontación sino a vivir como hermanos y hermanas “buscando siempre la paz y evitando todo tipo de exaltación, para que recuperéis vuestra esencia”.

Y ha concluido con un llamamiento a ser “ser testigos de la paz y del amor, y que incluso seamos testigos también del perdón” para superar los conflictos.