Huelva vive un nuevo caso de abandono de trabajadoras temporeras y otro incendio en asentamientos
En pocos días, el sector agroindustrial de Huelva ha sido escenarios de nuevas injusticias y casos de explotación laboral. Un nuevo incendio calcinó un asentamiento de trabajadores temporeros en el municipio de Moguer este lunes, mientra que el sindicato CCOO ha denunciado el abandono de trabajadoras marroquíes contratadas en origen por parte de su empleador.
La empresa Berrys la Dehesa ha abandonadas sin contrato, ni nómina a varias personas trabajadoras de origen marroquí empleadas en la campaña agrícola, a las que presiona para que retornen por sus propios medios, según denuncia el sindicato CCOO.
CCOO Huelva ha tenido conocimiento de la grave situación de vulneración de derechos laborales y humanos en la que se encuentra un grupo de trabajadoras temporeras que llegaron a Huelva el pasado 7 de abril para incorporarse a la campaña agrícola. Tras trabajar apenas unas semanas, hasta principios de mayo, dejaron de ser incluidas en las faenas agrícolas.
A día de hoy, no disponen de contrato firmado, ni de nóminas que acrediten su relación laboral, sin que consten gestiones para tramitar la documentación necesaria para su estancia y trabajo en el país. Ante el temor a posibles represalias o expulsiones forzosas, las trabajadoras pasan el día fuera de sus viviendas.
La falta de actividad laboral durante más del 85% del tiempo previsto en el contrato supone un claro incumplimiento de las condiciones del programa de contratación en origen, lo que vulnera gravemente la legalidad vigente.
Las trabajadoras, una de ellas embarazada de cinco meses, habían enviado el salario recibido en abril a sus familias confiando en que seguirían cobrando al mes siguiente, por lo que han quedado en una situación de extrema vulnerabilidad económica.
Según denuncia la organización de trabajadores, la encargada de la finca y el propio empresario están presionando a las trabajadoras para que abandonen España por sus propios medios, incumpliendo los compromisos adquiridos con su contratación.
En una reciente conversación telefónica mantenida entre el empresario y un representante de CCOO, éste se negó de manera tajante a regularizar la situación de las mujeres y amenazó a los representantes sindicales.
CCOO exige la regularización inmediata de la situación laboral y documental de estas trabajadoras y una investigación para determinar las responsabilidades empresariales y administrativas derivadas de estos hechos.
La secretaria general del Sindicato Provincial de Industria de CCOO Huelva, Teresa Pulido, ha advertido que su organización “no va a permitir que se juegue con la dignidad ni con los derechos de las mujeres trabajadoras migrantes, que vienen cada año a Huelva a sostener un sector clave para la economía local” y ha pedido que se garanticen los derechos y la seguridad de las temporeras.
Quinto incendio en un asentamiento
Un nuevo incendio, el quinto en lo que va de año, ha devastado en la tarde del lunes el asentamiento de personas trabajadoras migrantes en el paraje de La Malvina, en el municipio onubense de Moguer.
Las llamas alcanzaron las chabolas construidas con materiales inflamables, destruyendo decenas de viviendas precarias. Se estima que más de 80 personas jornaleras y jornaleros del campo habrán perdido sus hogares y pertenencias.
El incendio, que fue extinguido por la noche gracias a la intervención del Consorcio Provincial de Bomberos, arrasó más de 20 hectáreas y presentó al menos ocho focos, lo que ha llevado a las autoridades a considerar que pudo haber sido provocado. Así lo ha señalado la subdelegada del Gobierno en Huelva, María José Rico, mientras que el alcalde de Moguer, Gustavo Cuéllar, ha afirmado que existe “un alto porcentaje de probabilidad de intencionalidad”.
Desde la Asociación La Carpa, Alfonso Romera ha denunciado que el Ayuntamiento ha comunicado a las personas afectadas que no podrán reconstruir sus chabolas. “Están siguiendo la misma estrategia que en Lepe: pasar del chabolismo al sinhogarismo. Van a dormir en la calle sin que les dejen levantar sus chabolas”, ha declarado.
Este nuevo siniestro se suma a una larga lista de incendios que, desde 2019, han dejado al menos cinco personas muertas y miles sin hogar en los asentamientos agrícolas de la provincia. En enero de este año, un trabajador ghanés falleció calcinado en Lucena del Puerto.
Organizaciones como Jornaleras de Huelva en Lucha recuerdan que estas personas están en plena campaña de recolección de frutos rojos, un sector que genera millones de euros y del que “presumen los dirigentes políticos”, mientras se mantiene a quienes lo sostienen en condiciones de extrema precariedad.
