Trabajadores cristianos de Burgos se movilizan contra la siniestralidad laboral

Trabajadores cristianos de Burgos se movilizan contra la siniestralidad laboral
Trabajadores cristianos de Burgos convocan una concentración para solidarizarse con las víctimas de la siniestralidad y reclamar la mejora de las medidas de prevención de riesgos para evitar más muertes en el trabajo

Este viernes, a las 20 horas, en la Plaza del Cid (junto al Teatro Principal), se recodará con un minuto de silencio a los tres trabajadores fallecidos en accidente laboral en los dos últimos meses.

Se trata de J. J. P., transportista de 57 años que sufrió un accidente de tráfico en la N-623 a la altura de la localidad de Escalada, el pasado 30 de octubre; J. C. O., agricultor de 31 años, arrollado el 5 de noviembre por su propio tractor en Hormazuela; y un transportista de 61 años muerte en accidente, el 22 de noviembre en la N-627, a la altura de la localidad de Pedrosa de Valdelucio.

La Hermandad Obrera de Acción Católica (HOAC) de Burgos con esta movilización quiere expresar su “dolor más sentido y solidaridad con los familiares, amigos y compañeros de estos trabajadores”, además de reafirmar su compromiso en la lucha por unas condiciones de trabajo dignas y por la defensa de la salud laboral, para todas las personas, como parte de la campaña “Cuidar el trabajo, cuidar la vida”.

A pesar del desarrollo legislativo, científico y técnico de la prevención de riesgos laborales, las muertes en el trabajo continúan y su número está creciendo.

Cada día, dos personas mueren en el trabajo y 35 son hospitalizadas por accidentes laborales en nuestro país. En Castilla y León ya son más de 40 trabajadores los que han perdido la vida en sus puestos de trabajo en lo que va de año. En la provincia de Burgos se ha registrado el mayor número de víctimas mortales en el trabajo, con 12 fallecidos, diez durante la jornada y dos in itinere.

Aunque la pérdida de vidas en el trabajo representa el caso más dramático y extremo de la falta de prevención, no se debe olvidar que se registran más de 19.000 accidentes de trabajo con baja.

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Ante esta realidad, este movimiento de la Iglesias diocesana reclama “el compromiso de toda la sociedad: administraciones, empresarios, trabajadores, sindicatos, partidos políticos, asociaciones, etc., ya que “nadie, absolutamente nadie, debería perder la vida por trabajar y huir de la pobreza”.

Un problema social y político

Para la organización de de trabajadoras y trabajadores cristianos la siniestralidad laboral es “un problema social y político, que no solo afecta a los implicados en el ámbito laboral”, sino que genera un enorme sufrimiento a trabajadores y familias.

Algunas de las causas que están detrás de los accidentes laborales son la falta de control en las medidas de seguridad, la escasa formación, el empleo precario, la subcontratación o la economía sumergida.

Las enfermedades relacionadas con el trabajo son también una de las causas que convierten el trabajo en un lugar peligroso. Conllevan muchas bajas laborales y ocasionan bastantes muertes por enfermedades cardíacas y accidentes cerebrovasculares debido a largas jornadas de trabajo o la exposición a materias tóxicas, gases y humos.

“Afirmamos que las personas trabajadoras tienen derecho a unos ambientes de trabajo y a procesos productivos que no comporten perjuicio a la salud física y mental”, explica la HOAC de Burgos, que insiste en que la siniestralidad “no es mala suerte. No es inevitable. El trabajo debe ser un lugar donde, además de ganarnos un sueldo para vivir, podamos desarrollar nuestras capacidades y ponerlas al servicio del bien común. No un sitio donde enfermar o incluso morir”.

Para este movimiento especializado de Acción Católica, urge mejorar las condiciones laborales y mayor seguridad en los trabajos, mayor implicación de las instituciones para controlar el cumplimiento de la ley y aumentar la conciencia y sensibilidad social y empresarial.

Las personas trabajadoras, entiende la HOAC de Burgos, no podemos “resignarnos”, porque “el trabajo es para la vida”. “Si todos  ponemos los medios necesarios crecerá la esperanza”.