ITD apuesta por la reducción de la jornada laboral y pide la regularización extraordinaria de migrantes

ITD apuesta por la reducción de la jornada laboral y pide la regularización extraordinaria de migrantes
FOTO | Trabajadoras y trabajadores migrantes en Huelva. Vía Miguel Vázquez, EFE
En el décimo aniversario de Iglesia por el Trabajo Decente (ITD), la Jornada Mundial por el Trabajo Decente, que se celebra el 7 de octubre, adquiere un significado especial. Este año, la iniciativa renueva su compromiso con la promoción de un trabajo que cuide la dignidad y los derechos de todas las personas trabajadoras y el planeta.

En un contexto de desafíos globales y locales, ITD –promovida por Cáritas, la Conferencia Española de Religiosos (CONFER), la Hermandad Obrera de Acción Católica (HOAC), Justicia y Paz, la Juventud Estudiante Católica (JEC) y la Juventud Obrera Cristiana (JOC)– subraya la necesidad de una reflexión profunda sobre las condiciones laborales. “El ser humano expresa y acrecienta la dignidad de su vida a través del trabajo”, recordó el papa Francisco en su exhortación apostólica Evangelii gaudium, destacando el valor intrínseco del trabajo en la vida humana.

El manifiesto de ITD, Por ti, por mí, trabajo decente, para esta jornada alerta sobre las graves situaciones que afectan a miles de trabajadores en España. Entre los problemas más urgentes, se menciona “el desempleo estructural”, que impide a muchas personas acceder al mundo del trabajo, así como la “temporalidad” que dificulta la estabilidad de los proyectos de vida de quienes trabajan. Además, la “plaga insoportable” de la siniestralidad laboral, la pérdida de poder adquisitivo y el aumento de las enfermedades psicosociales también son señalados como ejemplos claros de lo que ITD señala como “trabajo indecente”.

“La dignidad de la persona trabajadora es innegociable y debe estar en el centro de todas las decisiones políticas y económicas”, reclama ITD en su manifiesto, alineándose con la Doctrina Social de la Iglesia, que defiende el derecho de todo ser humano a un trabajo decente.

Trabajo que cuida a las personas trabajadoras y al planeta

Otro de los aspectos claves del manifiesto es la necesidad de conectar el trabajo decente con la ecología integral, tal como propone el papa Francisco en su encíclica Laudato si’. El texto señala que “las actividades laborales deben ser sostenibles y respetuosas con el medioambiente”, promoviendo prácticas que aseguren la preservación de la casa común ahora y para las generaciones futuras.

La ITD también hace un llamado a crear entornos laborales que promuevan el bienestar integral de las peesonas trabajadoras. Citando al papa Francisco en su discurso durante la Cumbre Mundial del Trabajo en 2021, recuerda que “el trabajo es una forma de cuidar y dignificar la vida humana”, y que se deben promover “entornos laborales con derechos, participativos, seguros y respetuosos”.

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El manifiesto enfatiza la importancia del bien común como objetivo central en las políticas públicas. Esto, afirman, debe incluir no solo la promoción del trabajo decente, sino también el acceso a servicios esenciales como la vivienda y la salud. ITD, además, hace un llamado explícito al Congreso para que impulse la “regularización extraordinaria de personas migrantes”, como parte del compromiso por una sociedad más justa y equitativa.

En la diócesis donde la iniciativa tiene implantación se realizará, en la Jornada Mundial por el Trabajo Decente, un gesto que ayude a reflejar la lucha por este anhelo compartido de forma solidaria. La propuesta es escribir en cajas de cartón aquellos retos pendientes, como por ejemplo “seguridad en el trabajo”, “conciliación familiar”, etc. Posteriormente, se invita a pasar la caja a la persona que esté más cercana haciendo una cadena. Este “paso de testigo” o “relevo” pretende simbolizar que el trabajo decente es un tesoro que merece la pena ser compartido.

Décimo aniversario: Compromiso renovado y lugar de encuentro

Al conmemorar este décimo aniversario, ITD celebra los logros alcanzados y agradece a las personas e instituciones que han apoyado la causa del trabajo decente. “Nos comprometemos a seguir luchando por la dignidad y el cuidado de las personas trabajadoras”, concluye el manifiesto, reafirmando la importancia de mantener viva la esperanza de un trabajo que, en palabras de Francisco, “sea un camino hacia una vida digna”.

En concreto, el día 8 de octubre, será el turno de la jornada de encuentro y diálogo que reunirá pasado, presente y futuro de la iniciativa Iglesia por el Trabajo Decente. Además, en el acto participarán la pastoral del trabajo de la Conferencia Episcopal (CEE), la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y de Comisiones Obreras (CCOO) compartiendo, por primera vez, mesa de diálogo.