30 años de “La pastoral obrera de toda la Iglesia”: memoria agradecida, sueños compartidos

Cada aniversario intentamos volver a hacer memoria agradecida de nuestra historia. Esto nos ayuda a reflexionar sobre el momento actual del mundo obrero y de la Iglesia, preparándonos para «soñar juntos» y renovar nuestro compromiso evangelizador en el mundo obrero y del trabajo.

Desde el Departamento de la Pastoral del Trabajo de la Conferencia Episcopal Española estamos en esta dinámica de discernimiento e impulsamos que las diócesis también la vivan. Para ello estamos publicando artículos, hemos pedido a distintas personas que nos graben videomensajes y difundimos en las redes una serie de imágenes con distintos mensajes que nos ayudan a ello. Trabajo que celebraremos el 23 y 24 de noviembre en Ávila.

En estas jornadas reflexionaremos sobre la aportación del magisterio del papa Francisco a la pastoral del trabajo, haremos memoria de estos 30 años y presentaremos la exposición itinerante «Rostros del mundo obrero y del trabajo», que recogerá la realidad del mundo del trabajo hoy y que recorrerá España durante el Jubileo «Peregrinos de la esperanza».

Mirar nuestra historia de forma agradecida, seguir incorporando el magisterio de la Iglesia a nuestra labor evangelizadora y acompañar la vida del mundo del trabajo podría ser la síntesis de esta celebración.

Soñar juntos la evangelización del mundo obrero y del trabajo

Desde la pastoral del trabajo vemos necesario resituarnos continuamente ante los cambios que se van produciendo en el mundo obrero: las nuevas situaciones que crean trabajadores precarios o pobres, la irrupción de los algoritmos y la inteligencia artificial en el mundo del trabajo, los trabajadores migrantes, la brecha laboral entre hombres y mujeres, ganar tiempo para la vida, el cuidado de la casa común, los trabajadores y el trabajo de los cuidados, etc.

Para responder a nuestra misión también hemos de partir de la realidad eclesial en la que nos encontramos: una Iglesia con menos miembros y más mayores, una Iglesia que necesita recorrer el camino sinodal al que nos invita el papa Francisco, una Iglesia que debe crecer en encarnación y profetismo, una Iglesia que debe promover y acompañar una mayor presencia de los laicos en la vida pública, etc.

También vemos necesario que la pastoral del trabajo sea cada vez más de toda la Iglesia. Para ello hay que trabajar más con otras pastorales, compartir proyectos comunes, hay que llegar más a las parroquias, hay que seguir creando conciencia sobre el sentido del trabajo humano y cómo su actual configuración nos deshumaniza. Iniciativas como la de Iglesia por el Trabajo Decente, de la que este año cumplimos el 10º aniversario, nos pueden ayudar a ello.

Del magisterio del papa Francisco vemos necesario recoger algunos elementos novedosos en los que debemos profundizar y hacer praxis, entre ellos: «Si el trabajo es una relación, tiene que incorporar la dimensión del cuidado, porque ninguna relación puede sobrevivir sin cuidado».

Estos son algunos de los mimbres con los que debemos abordar el futuro de la evangelización del mundo obrero y del trabajo. Con la ayuda de Dios, nos ponemos manos a la obra.

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Artículo publicado originalmente en la revista ¡Tú!

Antonio Javier Aranda

Director del departamento de Pastoral del Trabajo de la Conferencia Episcopal Española.