Jesús Pérez: “La ciencia debe respetar la dignidad humana y el bien común”
Jesús Pérez Peña, catedrático de Química Física y director del Aula Cultural Manuel Alemán de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, es el ponente de la próxima sesión de la Escuela de Formación Sociopolítica y Fe Cristiana de la Diócesis de Canarias, con el tema Aspectos éticos en la ciencia. Algunas reflexiones. La charla es este martes 23, a las 19:30 horas, en la Casa de la Iglesia. También se puede seguir por Zoom. Para Pérez: “Toda investigación debe tener en cuenta principios éticos y, sobre todo, la dignidad de la persona y el valor de la vida”.
¿Qué se propone abordar con su ponencia sobre Aspectos éticos en la ciencia?
Haciendo un breve examen sobre la situación actual de los avances de la ciencia en algunos ámbitos del conocimiento, cuestiones relativas a la energía, biología y ciencias biomédicas, etc., expondré reflexiones sobre los vivos debates que se mantienen acerca de los condicionamientos éticos en sus aplicaciones tecnológicas. Como ejemplo, se puede hacer mención a las implicaciones desde el punto de vista ético de temas como los de la neurociencia y desarrollo de la neurotecnología o inteligencia artificial, haciendo referencia a los análisis llevados a cabo por diferentes autores y las recomendaciones establecidas para actuaciones en este campo.
¿Cuál es la semejanza y la diferencia entre moral y ética?
Es una cuestión filosófica. Podemos partir con las preguntas ¿qué es lícito hacer? ¿Qué es lo que se debe hacer y lo que no se debe hacer? Como expresa el profesor Ramón Valls en su obra Ética para la bioética, las costumbres (ethos) y las leyes dan a cada pueblo su fisonomía moral. Leyes y costumbres de tanto tradición el derecho y objeto preferente de la ética.
Pero la ética también se debate por encima o al lado de lo que es la moral, en el sentido de las costumbres y de la ley. Lo ético es primero observancia de las normas sociales objetivas (Ética vivida), es después conciencia moral interior o virtud, y es finalmente reflexión teórica sobre los deberes objetivos y subjetivos (Filosofía moral).
Tenemos el ejemplo más claro en Antígona de Sófocles cuando pedía permiso para enterrar a su hermano, pero la ley lo prohibía. Apunta que hay cuestiones por encima de la ley que son las leyes no escritas como la costumbre de enterrar a los muertos.
¿Qué principios éticos básicos debe tener cualquier investigación científica?
Partiendo de la base de que la ciencia no agota por sí misma toda la capacidad del universo intelectual ni tiene respuesta a todos los problemas, debe plantearse todas las acciones para que se encaminen a la revalorización del concepto de la dignidad humana, el valor de la vida, el de la identidad de cada ser humano, el respeto a las relaciones humanas fundamentales, la búsqueda de la justicia social y el bien común; podríamos pensar en actuar en el sentido de lo que Hans Jonas ofrece en su obra El principio de responsabilidad como ensayo de una ética para la civilización tecnológica, que compromete y obliga a los humanos a elegir la acción correcta de cara a las generaciones futuras bajo el imperativo categórico de que “la humanidad sea posible”.
No hay que olvidar que la ciencia y la sociedad mantienen una relación permanente.
¿En qué medida la ciencia tiene en cuenta la ética?
La tiene en cuenta, aunque ha tenido momentos en los que no ha podido separarse de los avatares de la sociedad que les rodea como su papel en los grandes conflictos mundiales en los que la ciencia (o gran parte de los científicos) no se aislaron del conflicto. Ahí la ética, por cuestiones políticas, se posicionó al lado de los bandos contendientes (o desapareció).
Pero, a los científicos les preocupa mucho los principios éticos sobre la base que hemos apuntado, en el desarrollo de la ciencia y en su proyección hacia la sociedad, para el que se están haciendo muchas llamadas a un diálogo efectivo, como por ejemplo ha hecho la UNESCO en las diversas comisiones convocadas para la neurociencia, neotecnología y la cuestión de la inteligencia artificial, Existe un principio categórico que todo aquello que se pueda hacer o investigar, ha de tener unos límites éticos en sus consecuencias. Es una necesidad evidentemente.
El papa Francisco ha dicho que “existen límites éticos que debe respetar la ciencia por el bien de la humanidad”. ¿Cuáles serían?
El papa Francisco en Laudato si’, habla del paradigma tecnocrático como fruto de la forma en la que la humanidad ha asumido la tecnología, advirtiendo de su influencia en el ámbito político y económico y las dificultades a contribuir a una visión integral del ser humano y del mundo.
Pero también dice de forma clara que “la tecnocracia bien orientada, nos hace ver no solo que puede producir cosas realmente valiosas para mejorar la calidad de la vida del ser humano, sino que también… puede “hacer saltar al ser humano inmerso en el mundo material al ámbito de la belleza”.
¿Qué se debería hacer para que la investigación y la innovación, entre la que se encuentra la inteligencia artificial, sean más humanas?
Ya se ha comentado algo anteriormente, no solo en la inteligencia artificial, sino también en la neurociencia, la UNESCO ha establecido a través de reuniones y trabajos coordinados por comisiones de expertos una serie de recomendaciones que se sustentan en una serie de objetivos y valores como respetar los principios de proporcionalidad e inocuidad, seguridad y protección, equidad y no discriminación, sostenibilidad, derecho a la intimidad y protección de datos, transparencia, supervisión y decisiones humanas, sensibilización sobre las situaciones que hay que mirar y cuidar, sensibilización y educación, responsabilidad y rendición de cuentas y la necesidad de establecer una gobernanza y colaboración adaptativa entre las partes interesadas, en las que rijan las cuestiones éticas en la neurotecnología y en la inteligencia artificial.
Periodista y militante de la HOAC de Canarias