El Servicio Jesuita Migrantes pide a los partidos políticos que defiendan la hospitalidad y la inclusión
El Servicio Jesuita a Migrantes ha hecho un llamamiento a los partidos políticos y a la ciudadanía para defender la hospitalidad como seña de identidad de “una sociedad abierta, acogedora e inclusiva comprometida con la defensa de los derechos humanos y con el fin de las muertes en las fronteras”.
Así, el comunicado comienza haciendo notar que “los fenómenos de movilidad humana no son una novedad y han acompañado siempre el desarrollo de la humanidad, sin embargo son hoy un signo de los tiempos que responden a la desigualdad global y la injusticia socioambiental que han extendido los conflictos, la violencia, la pobreza y la inestabilidad a niveles globales afectando a todas las regiones del mundo”.
No obstante, destaca el SJM, en la actualidad todo ello ha generado “un fenómeno sin precedentes de personas que se ven obligadas a migrar donde la migración económica y la migración forzosa no son separables”.
Para la organización jesuita de atención a las personas migrantes, la diversidad cultural es “una riqueza que cuidar y cultivar. “Una diversidad que ha acompañado siempre la evolución de nuestras sociedades en un proceso civilizatorio en el que somos producto de la apertura, el intercambio constante, la convivencia y el aprendizaje”, se lee en el comunicado.
Piden a los partidos políticos que entiendan los fenómenos migratorios “en su complejidad” y les animan a responder con “políticas integrales orientadas a la articulación de un modelo de gestión de la migración viable, sostenible y eficaz, adaptado al contexto y a la realidad migratoria”.
Proteger, incluir e integrar
Desde su punto de vista la política migratoria debería fundamentarse en tres principios:
La protección de la vida de las personas migrantes, garantizando los derechos humanos en las fronteras, lo que implica el cierre de los Centros de Internamiento de Extranjeros y el impulso de vías legales múltiples, seguras y efectivas para aquellas personas que migran de manera forzosa.
La inclusión con un enfoque de accesibilidad cultural y gestión de la diversidad que apoyen a las personas migrantes recién llegadas a nuestro país a superar las brechas de desigualdad y promover el acceso a derechos.
La convivencia orientada al encuentro de modo que promueva la cohesión social y la gestión positiva de la diversidad desde la participación comunitaria y la lucha contra el racismo, y los discursos xenófobos y criminalizadores de la inmigración.
Redactor jefe de Noticias Obreras