«La renta no puede ser el único criterio porque algunas personas estamos desamparadas»
Marta Mateu es sevillana, de Tomares, y tiene una hija de cuatro años. La pandemia la encontró con una peluquería recién abierta que, enseguida, tuvo que cerrar. Se fue a la fresa, a Huelva y, al finalizar el confinamiento, intentó de nuevo recuperar su negocio, pero no pudo ser. Ahora hace algunos trabajillos mientras consigue una ayuda para salir adelante.
¿Qué pasó con la peluquería, Marta?
Pues pasó que yo acababa de abrirla, en abril de 2019, cuando en marzo de 2020 nos confinaron. Estaba empezando a tener mi clientela, pero, además, como el local era muy pequeño, por las restricciones sanitarias posteriores solo podía atender a una persona cada vez y se hizo insostenible.
¿Y qué hiciste entonces?
Pues me enteré de que, en Huelva, en una cooperativa necesitaban gente para recoger fresa y fui. Iba y venía todos los días a casa.
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Periodista.
Responsable de Comunicación de Cáritas Valencia.
Militante de la HOAC
