Los sindicatos piden combatir la precariedad laboral de los migrantes
En el Día Internacional del Migrante, los sindicatos defienden políticas migratorias basadas en derechos humanos y acciones contra la discriminación laboral.
UGT reafirma su compromiso con la lucha contra la precariedad y la explotación laboral, la trata de seres humanos y el trabajo forzoso de las personas migrantes, en su empeño por lograr “la igualdad de trato y oportunidades en el trabajo y en la sociedad de la población migrante”.
El sindicato que dirige Pepe Álvarez menciona la importancia de los flujos migratorios en la historia y el presente de nuestro país y recuerda que hay más de 2,7 millones de personas de nacionalidad española viviendo fuera de nuestras fronteras, mientras que en España hay cerca de 5,5 millones de personas con nacionalidad extranjera y 2,5 millones con nacionalidad española nacidas en el extranjero.
Por su parte, CCOO plantea las migraciones “como un hecho normal en las sociedades contemporáneas” que debe atenderse con políticas migratorias de derechos humanos y no en razones de seguridad·.
Este sindicato cree necesario “articular un discurso normalizado y normalizador de las migraciones, dado que no puede entenderse ninguna sociedad contemporánea –tampoco la española– sin la aportación cotidiana de la población migrante”.
Sufren mayor precariedad
UGT destaca que el motivo fundamental de la migración hacia España es laboral, al tiempo que incide en que la población migrante soporta mayor precariedad en el trabajo.
Según los datos, las personas con doble nacionalidad cobran un 21,7% menos que los de nacionalidad española, y los de la nacionalidad extranjera, un 26´5% menos, ocupando el 34% y el 23% de las ocupaciones sin cualificación, frente al 8,7% de quienes tienen la nacionalidad española. En el caso de las mujeres migrantes, la situación todavía presenta mayores desigualdades, “algo que tiene una relación directa con el empleo en el trabajo doméstico”, destaca UGT.
De tener en cuenta únicamente los ingresos del año 2020, el 59% de la población de nacionalidad extranjera nacional de terceros países se encontraba por debajo del umbral del riesgo de pobreza, un porcentaje más alto que el alcanzado en la anterior crisis económica para este grupo de población.
El sindicato que lidera Unai Sordo defiende que para afrontar las migraciones por causas laborales o económicas hace falta un desarrollo jurídico normativo con las aportaciones del diálogo social.
Por ello, CCOO se reafirma en su rechazo ante la reciente aprobación unilateral, por parte del Gobierno de España, de una reforma parcial del Reglamento de la Ley de Extranjería al considerar que se facilita “mano de obra subsidiaria” a las empresas sin necesidad de ofrecer condiciones de trabajo dignas. Además, exigen la aprobación del Reglamento de desarrollo de la Ley de Protección Internacional para adecuar la praxis cotidiana a las situaciones nuevas que se están produciendo.
Redactor jefe de Noticias Obreras