Clara Pardo: “La pandemia está relegando al olvido el hambre y la pobreza”

Clara Pardo: “La pandemia está relegando al olvido el hambre y la pobreza”
Manos Unidas ha presentado su campaña “Comparte solidaridad para acabar con el hambre” para denunciar las consecuencias que la pandemia del coronavirus está teniendo entre las personas más vulnerables del planeta y en promover la solidaridad entre los seres humanos.

“Nuestra aldea global parece hoy más dividida que nunca entre el rico Norte y el Sur empobrecido”, ha comentado la presidenta de Manos Unidas, Clara Pardo, en el acto de presentación, quien también se ha lamentado que la pandemia “esté relegando al olvido a otras crisis y emergencias que matan y causan más estragos que el virus y de las que nunca nadie parece acordarse: el hambre y la pobreza”

Estas emergencias, ha añadido “derivan de la pandemia más dolorosa y más vergonzante a la que se enfrenta el ser humano: la de la desigualdad”. Una desigualdad que ha llevado a que el número de personas que pasan hambre supere los 800 millones y a que en el mundo haya 1300 millones de personas afectadas por la pobreza. Con esta campaña, “queremos contagiar esperanza, porque la esperanza es el motor que nos empuja para trabajar todos los días”, asegura la presidenta de la ONG de la Iglesia católica.

Raquel Reynoso, presidenta de la Asociación Servicios Educativos Rurales, socio local de Manos Unidas en Perú, participó a través de internet en la presentación, para explicar que “el trabajo de Manos Unidas es clave en este camino y funciona muy bien porque se basa en la solidaridad”. “Todos los varones y mujeres con quienes venimos trabajando todos estos años, nos han demostrado que la solidaridad es posible, pero para que sigan con su trabajo y esfuerzo, necesitan del apoyo de todos nosotros. Tenemos que contagiarnos de solidaridad para acabar con el hambre”, propone Reynosa.

También Alicia Vacas, misionera comboniana afincada en Israel, intervino para desear que esta crisis, “sea la oportunidad que nos da la vida para ponernos en la piel de los que más sufren. De los que están cerca de nosotros y también de los que están lejos. Ojalá nos sirva, también, para que esa solidaridad que hemos demostrado durante los peores meses de la pandemia se extienda también más allá de nuestras fronteras”.