Hacer comunidad
A simple vista podemos comprobar que «comunicar» tiene la misma raíz que «comunidad» y «comunión», es decir, común. Y si ahondamos más en su etimología, encontramos que, las tres palabras, provienen del latín communis que significa «intercambio de regalos».
Esta coincidencia nos lleva a pensar por qué, de estos tres términos, «comunicar» se haya alejado tanto de su origen, pues en su uso y práctica cuesta más encontrar el intercambio y los regalos. Basta ver la realidad comunicativa actual para verificar que, no es una exageración afirmar que los medios que se utilizan para comunicar socialmente se encuentran en las antípodas de las buenas intenciones del origen del verbo.
La mayoría tenemos nociones básicas sobre qué ingredientes se necesitan para una adecuada comunicación. Alguna vez hemos estudiado la teoría del proceso comunicativo que explica los elementos que intervienen en su desarrollo: un emisor, un receptor, un mensaje, un código, un canal y un contexto.
Cualquier persona puede identificar estos componentes en sus conversaciones diarias: alguien que habla, alguien que escucha, palabras que emitimos o escribimos para expresar opiniones, vivencias, dar información…, por teléfono, correo electrónico, en un encuentro en la calle, el bloque, el mercado, en la cola del paro… Si se dan las condiciones ideales, todo transcurrirá sin ningún tipo de obstáculo que impida la comprensión y el intercambio.
Esta tarea que realizamos con total normalidad y de forma habitual es una necesidad. Comunicarnos implica cercanía, conocimiento, escucha, pero, sobre todo, relación. Conversar supone predisposición a compartir, a participar en la vida de la otra persona y, a la vez, abrir la puerta para que forme parte de la nuestra. Desde estas premisas, este proceso se convierte en la base para la formación de una comunidad, puesto que entraña reciprocidad: se da y se recibe, se recibe y se da. La frontera entre el emisor y el receptor se confunden y es, en ese momento, cuando puede considerarse exitoso el diálogo emprendido.
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Militante de la HOAC de Canarias
