“Barrios Ignorados” de Córdoba proponen diez propuestas políticas para una ciudad más humana #28M
La delegación en Córdoba de la Asociación Andaluza de Barrios Ignorados (AABI), ha elaborado un documento ante las próximas elecciones municipales que contiene diez propuestas políticas para hacer de Córdoba y, en concreto, de tres de sus barriadas más pobres (Moreras, Palmeras y Guadalquivir), una ciudad más humana.
Estas propuestas, elaboradas con participación de vecinas y vecinos de los tres barrios, se han presentado a algunas formaciones políticas (las más receptivas han sido PSOE, Cs y la confluencia Hacemos Córdoba, que integra a IU, Podemos, Más País, Alianza Verde, Iniciativa del Pueblo Andaluz y Verdes-Equo), que concurren a estas elecciones, con la esperanza de que las hagan suyas y las concreten en acciones que saquen a estos barrios del olvido y la exclusión. Hay que recordar que cuatro barrios de la ciudad figuran entre los quince más pobres de España, sin contar los múltiples asentamientos chabolistas (mayoritariamente de población inmigrante rumana de etnia romaní), que ni siquiera tienen la consideración de barrios y que reúnen casi todas las características del antiguo régimen de “apartheid”.
Compuestos mayoritariamente por familias numerosas cuyos ingresos no permiten cubrir las necesidades mínimas vitales, su supervivencia depende fundamentalmente de la economía sumergida o de empleos desregulados sin contrato en los que se viven situaciones de explotación límite.
El documento parte de dos condiciones que siendo necesarias no son suficientes: trabajar solo por la transformación urbana del territorio no erradica la pobreza y trabajar individualmente por la persona excluida no reduce la desigualdad territorial. Todo está entrelazado y conectado, por lo tanto, para dar una respuesta eficaz, hay que trabajar todas las dimensiones: humana, urbana e integral, de una manera coordinada y con la mirada puesta a medio y largo plazo.
Las diez peticiones están agrupadas en tres áreas:
En cuanto al área urbana: habitabilidad, vivienda y economía, destacan la instalación y uso de espacios públicos como los centros cívicos o de ocio, que eviten el aislamiento de estas barriadas, la instalación de pequeñas infraestructuras, tipo parques infantiles o de mayores, con el fin de mejorar la vida diaria, la limpieza y accesibilidad en los espacios públicos, un plan de vivienda fundamental para la erradicación de las infraviviendas y el sinhogarismo y la dinamización de su economía con incentivos municipales, fomentando el pequeño comercio de cercanía, que está desapareciendo.
En el área humana: inclusión y convivencia, proponen establecer el indicador de presupuesto de referencia para unas condiciones de vida digna (PRCVD)[1], adaptado a Córdoba, implantando medidas concretas que garanticen que todos los demandantes de ayuda alcancen dicho indicador, la atención personalizada en todos los servicios que presta el Ayuntamiento para eliminar las citas y la brecha digital a los colectivos más vulnerables, implantar itinerarios formativos familiares de Inclusión (contrato entre las familias y la administración) para tener en cuenta el contexto socio-familiar y una oficina de mediación para trabajar por la convivencia, con capacidad para la resolución de conflictos, tan habituales en barrios tan tensionados.
Por último, en el área de coordinación, apuestan por una oficina de inclusión de los barrios que se haga responsable del diseño, seguimiento y evaluación de los planes integrales comunitarios para la inclusión. Asimismo, esta oficina deberá velar por los derechos de los vecinos y vecinas que se vean vulnerados por otras administraciones, acompañándolos en sus reclamaciones
Es urgente que el trabajo por la inclusión sea una prioridad para el Ayuntamiento, cambiando el modo de intervenir en estos barrios, adoptando actuaciones integrales de largo recorrido que puedan ser evaluadas con objetividad e imparcialidad.
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[1] El PRCVD pone el foco en las necesidades globales de la persona y no en aspectos puntuales. Se calcula, teniendo en cuenta la suma de ocho partidas de gastos mínimos y necesarios que incluyen: alimentación, vivienda, equipamiento, suministros (energía, internet…), educación, ocio, gastos sanitarios y dependencia.
Militante de la HOAC de Córdoba y miembro de AVAELA
