Los obispos catalanes denuncian el desalojo de Badalona como un acto de aporofobia y xenofobia y reclaman una respuesta humanitaria urgente
Los obispos de la Conferencia Episcopal Tarraconense (CET) han hecho pública una nota tras el desalojo de la nave B9 de Badalona, que dejó a centenares de personas en la calle, en pleno invierno y sin alternativa habitacional. En su pronunciamiento, los prelados afirman que lo ocurrido “nos interpela con urgencia como Iglesia y como sociedad” y denuncian los relatos deshumanizadores que acompañan esta actuación. Reclaman la apertura urgente de una mesa de diálogo
“Estamos hablando de personas”, subrayan los obispos, que rechazan que se las despoje de su dignidad “por el hecho de ser inmigrantes africanos, negros y pobres”, calificando esta mirada de “aporofobia y xenofobia”. Y formulan una pregunta directa que atraviesa todo el comunicado: “¿No son personas? Los cristianos, ¿no estamos llamados a ‘amarlos como a nosotros mismos’ (Jn 13, 34-35)?”.
Sin “tregua invernal” y sin respuesta inmediata
La CET pone el acento en la gravedad del momento elegido para el desalojo, recordando que se ha producido en pleno invierno, sin que se haya contemplado “ni siquiera una ‘tregua invernal’, como se hace en otros países europeos”. Para los obispos, la respuesta ante una situación así no puede ser el silencio ni la indiferencia, y reclaman una actuación humanitaria inmediata que proteja a las personas afectadas.
Al mismo tiempo, advierten de que la urgencia no puede ocultar la necesidad de afrontar las causas de fondo que conducen a estas realidades de exclusión extrema. En este sentido, los prelados piden agilizar la tramitación de la ley del sinhogarismo, que “hace meses se está tramitando con lentitud”, a pesar de tratarse de un desafío que exige “soluciones más ágiles”.
Llamada al diálogo y a una respuesta coordinada
Más allá de la denuncia, los obispos formulan una propuesta concreta. Ofrecen y reclaman la apertura urgente de una mesa de diálogo, con la participación de las administraciones públicas competentes, las entidades del tercer sector y representantes de las personas afectadas, con el objetivo de articular respuestas coordinadas a corto plazo y una estrategia compartida a medio plazo.
La CET insiste en que la Iglesia católica viene señalando desde hace tiempo la necesidad de un modelo alternativo e integral de gestión de la inmigración, y advierte de que “en ningún caso la solución pasa por claudicar del diálogo ni por enfrentar a los ciudadanos precarizados”.
Derechos, convivencia y bien común
El comunicado concluye con una apelación a buscar “caminos que garanticen derechos, seguridad y convivencia”, tanto para las personas directamente afectadas por el desalojo como para el conjunto de la ciudadanía. Una llamada que conecta la respuesta pastoral y ética de la Iglesia con una responsabilidad política y social más amplia, y que se suma a las críticas ya expresadas por entidades sociales, organizaciones sindicales y colectivos vecinales.
Director de Noticias Obreras.
Autor del libro No os dejéis robar la dignidad. El papa Francisco y el trabajo. (Ediciones HOAC, 2019). Coeditor del libro Ahora más que nunca. El compromiso cristiano en el mundo del trabajo. Prólogo del papa Francisco (Ediciones HOAC, 2022)
