La HOAC de Barcelona denuncia la “inhumanidad” del desalojo de Badalona y reclama políticas al servicio del bien común

La HOAC de Barcelona denuncia la “inhumanidad” del desalojo de Badalona y reclama políticas al servicio del bien común
FOTO | Alejandro García, EFE
La Hermandad Obrera de Acción Católica (HOAC) de Barcelona y sant Feliu ha difundido una reflexión tras el desalojo de las personas que malvivían en el antiguo instituto B9 de Badalona. El texto denuncia que la actuación política municipal se realizó sin prever ninguna alternativa habitacional, ni siquiera provisional, y advierte de sus consecuencias sociales y humanas

La reflexión, fechada el 24 de diciembre, afirma que los hechos “interpelan nuestra conciencia cristiana” y critica que, “en aras del cumplimiento de las órdenes judiciales”, el ayuntamiento actuara “sin piedad y con inhumanidad”, al no haber previsto “ningún tipo de solución vital, ni tan sólo transitoria” para las personas afectadas.

El texto subraya que el desalojo dejó “a la intemperie y en la máxima desprotección” a personas que “deberían ser sujetos de derechos y no objetos de desecho”. Para esta organización eclesial comprometida con la pastoral del trabajo, esta forma de proceder refleja una manera de gestionar la pobreza que ignora la dignidad humana y agrava la exclusión residencial.

El movimiento de trabajadoras y trabajadores cristianos añade que se produjo un traslado de la responsabilidad institucional hacia organizaciones cívicas y religiosas, algunas de ellas sostenidas únicamente por voluntariado, pese a contar con “recursos limitados”. A su juicio, esta delegación evidencia una falta de asunción de responsabilidades por parte de las administraciones públicas.

Precariedad compartida y fractura social

El texto denuncia que se haya enfrentado “a vecinos y vecinas que padecen las mismas situaciones de precariedad laboral, en acceso a la vivienda” y el deterioro de los servicios públicos, “señalando como culpables a aquellas personas más empobrecidas”.

La reflexión advierte de que “la crueldad que se incentiva desde determinadas decisiones políticas desarrolla más crueldad” y aleja la acción pública de “los principales objetivos políticos: preservar la dignidad de toda y todas las personas y la búsqueda del bien común”.

La HOAC de Barcelona expresa su denuncia de estas “terribles situaciones” y el apoyo personal de muchas de sus personas militantes a las iniciativas solidarias surgidas ante la emergencia. Al mismo tiempo, reclama a las instituciones que trabajen por el bien común y “no culpabilicen a quienes más necesidades tienen”.

El texto concluye con una llamada a un compromiso firme por la fraternidad, que solo puede construirse desde “la convivencia, el diálogo y la búsqueda de la justicia basada en la equidad”, como base de respuestas duraderas a los problemas de vivienda en los barrios.