Desciende el paro registrado en noviembre, mientras la Seguridad Social pierde afiliación

Si bien el paro registrado descendió en 18.805 personas en noviembre en relación con el mes anterior, la afiliación a la Seguridad Social disminuyó en 14.358 cotizantes. Con todo, la destrucción del empleo es menor que en otros meses de noviembre.
El paro registrado descendió en 18.805 personas en noviembre en relación con el mes anterior (-0,8%) debido, sobre todo, al descenso del desempleo en el sector servicios y entre las mujeres, según datos publicados este martes por el Ministerio de Trabajo y Economía Social.
La Seguridad Social cerró noviembre con una pérdida media de 14.358 cotizantes respecto al mes anterior (-0,07%), según datos del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones. El descenso se debió principalmente al retroceso en la hostelería, que perdió 116.662 afiliados (-7,3%) tras el fin de la temporada turística.
Pese a la caída mensual, el sistema alcanzó 21.825.233 afiliados medios, la cifra más alta para un mes de noviembre en la serie histórica. En términos desestacionalizados, la afiliación subió en 44.734 personas (+0,2%), situándose en 21.838.253 cotizantes, máximo histórico.
El número total de desempleados se sitúa así en 2.424.961 personas, su menor cifra en un mes de noviembre desde 2007, con lo que la bajada experimentada ha sido más pronunciada que en noviembre del año pasado 2024 (-16.036 parados), aunque no menos que 2023 (-24.573 desempleados), 2022 (-33.512) y 2021 (-74.381).
Desde el inicio de la serie histórica comparable en 1996, el paro ha subido en noviembre en 21 ocasiones y ha bajado en nueve, siendo el de noviembre de 2008, con la crisis financiera, el aumento más pronunciado (+171.243 desempleados), y el de noviembre de 2021, el que
registró la mayor caída (-74.381 parados).
En lo que va de 2005, el desempleo acumula un descenso de 161.057 personas, lo que supone un 6,2% menos, con un retroceso del paro femenino de 90.705 mujeres (-5,8%) y una caída del desempleo masculino de 70.352 varones (-6,8%).
El descenso del paro se ha registrado en todos los sectores económicos, destacando especialmente el sector servicios, que redujo su cifra en 13.013 personas (-0,7%). Le siguieron la industria, con 1.552 desempleados menos (-0,8%); la agricultura, con una caída de 1.332 personas (-1,7%); y la construcción, que restó 881 parados (-0,5%).
Además, el colectivo sin empleo anterior, integrado mayoritariamente por jóvenes en busca de su primer trabajo, disminuyó en 2.027 personas (-0,9%).
La bajada afectó a ambos sexos, aunque el descenso entre las mujeres triplicó el de los hombres. En concreto, el paro femenino se redujo en 14.370 mujeres (-1%), mientras que el masculino lo hizo en 4.435 personas (-0,4%). Así, al cierre de noviembre, el número total de mujeres desempleadas se situó en 1.466.095, la cifra más baja para este mes desde 2007, mientras que el de hombres alcanzó 958.866, encadenando siete meses por debajo del millón.
Por edades, el desempleo entre los menores de 25 años cayó en 5.476 personas (-2,8%), mientras que entre los mayores de 25 años se redujo en 13.329 (-0,6%). Según el Ministerio, el total de parados menores de 25 años cerró noviembre en 188.392, el nivel más bajo para este mes desde el inicio de la serie histórica.
En noviembre se registraron 1.296.203 contratos, lo que supone un descenso del 0,4% respecto al mismo mes de 2024.
De ellos, 534.997 fueron indefinidos, un 1,7% menos que en noviembre del año anterior. Estos contratos representaron el 41,3% del total, frente al 42,6% alcanzado en octubre. Dentro de los indefinidos: 226.124 fueron a tiempo completo, 139.175 a tiempo parcial y 169.698 fijos-discontinuos. De enero a noviembre, se han formalizado más de 14,4 millones de contratos, un 1,2% más que en el mismo periodo del año anterior de los que casi 6 millones son indefinidos y 8,4 millones temporales.
En el último año, la Seguridad Social ha sumado 522.771 personas afiliadas (+2,4%). El Régimen General perdió 14.694 ocupadas en noviembre, mientras que el de Autónomos (RETA) ganó 2.045 afiliadas, alcanzando 3,42 millones, récord histórico.
Por sexos, la afiliación femenina descendió en 9.353 empleos (-0,09%), hasta 10,33 millones, y la masculina en 5.004 (-0,04%), hasta 11,48 millones. Entre los extranjeros, la caída fue de 16.058 cotizantes (-0,5%), situándose en 3,08 millones (14,1% del total).
Entre los sectores, además de la hostelería, destacaron los aumentos en educación (+29.483) y comercio (+23.905) por el inicio del curso y la campaña navideña. Baleares lideró las caídas territoriales con 94.457 afiliados menos, seguida de Castilla y León (-6.349) y Cataluña (-2.555), mientras que Madrid (+35.039) y Comunidad Valenciana (+22.376) encabezaron los incrementos.
El Ministerio subrayó la mejora estructural del empleo: la temporalidad se sitúa en el 12,2%, frente al 30,2% de 2018, gracias a la reforma laboral. Entre los menores de 30 años, la tasa ha bajado al 20,1%, frente al 53,3% de hace siete años.
Reacciones sindicales
El sindicato UGT ha destacado que la creación de empleo de “mejor calidad”, gracias a “los cambios impulsados en la última reforma laboral”. Sin embargo, advierte que todavía hay cuestiones relevantes que resolver en el funcionamiento del mercado de trabajo, en particular el alto desempleo de larga duración, la extensión de salarios más justos y elevados, acordes o la reducción de la jornada laboral sin merma salarial .
Esta organización apuesta por impulsar medidas que reincorporen al mercado de trabajo a las personas en desempleo de larga duración y que garanticen jornadas razonables, salarios dignos y un reparto más equitativo de los frutos del crecimiento económico.
El secretario de Comunicación de CCOO, Marcelo Ortega, ha insistido en que la mejora del empleo “debe sentirse en los hogares y en los centros de trabajo”, y que para ello resulta fundamental un incremento de los salarios porque nuestro mercado laboral es robusto, la rentabilidad empresarial está en máximos históricos y la productividad sigue creciendo.
Para Ortega, los datos muestran un mercado laboral “más fuerte, con empleo más estable y de mayor calidad”. Sin embargo, advirtió que los avances no serán completos mientras no se traduzcan en mejores condiciones de vida: “El desafío como país es que de lo que hoy podemos presumir —un empleo asalariado que avanza en calidad y estabilidad—, se palpe en la ciudadanía. Por eso es imprescindible que los salarios suban”.
El secretario general de USO, Joaquín Pérez, ha advertido que “hemos pasado de la temporalidad al engaño de la estabilidad precaria. Las empresas han encontrado en el contrato a tiempo parcial y el fijo discontinuo la fórmula perfecta para mantener plantillas flexibles y baratas, con la etiqueta de ‘indefinidos’, pero sin garantizar ni ingresos dignos ni jornadas suficientes”,
En concreto, este sindicato que los contratos indefinidos a tiempo parcial más los fijos discontinuos firmados en noviembre superan en un 36% a los indefinidos a jornada completa. Es más, solo el 17,4% del total de contratos firmados en noviembre fueron indefinidos a jornada completa. El 23,8% fueron indefinidos parciales y fijos discontinuos.
“Estamos ante un mercado laboral de dos velocidades: una minoría con empleos estables y dignos, y una mayoría atrapada entre la temporalidad y los indefinidos que no garantizan poder llegar a fin de mes”, añade Pérez.

Redactor jefe de Noticias Obreras



