“Los palestinos se enfrentan dos opciones: morir de hambre o arriesgarse a ser asesinados mientras intentan acceder a los escasos alimentos”

Decenas de personas han muerto en el sur de la Franja de Gaza al intentar acceder a cantidades mínimas de alimentos. El 1 de junio fueron asesinadas 32 personas; el 2 de junio, tres; el 3 de junio 27, todas ellas buscaban llegar al centro militarizado de distribución de comida
El Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Volker Türk, ha condenado estos hechos como “asesinatos” y ha denunciado la gravedad del sistema de distribución humanitaria impuesto por las autoridades israelíes, que excluye la participación de las agencias de la ONU y pone en riesgo la vida de las personas.
“Los palestinos se enfrentan a la peor de las opciones: morir de hambre o arriesgarse a ser asesinados mientras intentan acceder a los escasos alimentos que se distribuyen a través del mecanismo militarizado de asistencia humanitaria de Israel”, declaró Türk en un comunicado oficial, señalando que los ataques contra civiles “constituyen una grave violación del derecho internacional y un crimen de guerra”.
Las muertes se produjeron en las inmediaciones de un centro de distribución gestionado por una fundación de ayuda israelí-estadounidense. Según el Ministerio de Salud de Gaza, el 1 de junio fueron asesinadas 32 personas; el día 2, otras tres; y este martes, al menos 27 más. Los heridos, muchos de ellos en estado crítico, se cuentan por decenas.
Sistema de reparto ineficaz y contra las normas internacionales de ayuda
La ONU ha insistido en que el sistema actual de reparto no solo es ineficaz, sino que contraviene las normas internacionales de distribución de ayuda. “Ese sistema militarizado —en el que no participan las agencias de las Naciones Unidas— pone en peligro vidas y viola las normas internacionales”, advirtió Türk, quien urgió a Israel a cooperar con la ONU y respetar las órdenes vinculantes de la Corte Internacional de Justicia para permitir la entrada masiva y segura de ayuda humanitaria.
En la misma línea, el secretario general António Guterres calificó los asesinatos de “inaceptables” y lamentó que “los civiles arriesgan su vida, y muchas veces la pierden, para obtener comida”.
Guterres subrayó que “Israel tiene la obligación clara en virtud del derecho internacional de permitir y facilitar la asistencia vital para los civiles que la precisen” y reclamó el restablecimiento inmediato del flujo de ayuda con participación de las agencias de Naciones Unidas.
“Crímenes más graves del derecho internacional”
Jeremy Laurence, portavoz de la Oficina de Derechos Humanos de la ONU, confirmó en Ginebra que testigos presenciales aseguran haber visto disparos del ejército israelí contra quienes se acercaban a recoger alimentos. “Hemos recibido informes similares también de otras organizaciones presentes”, añadió. En respuesta a una pregunta concreta, Laurence precisó que los crímenes mencionados por Türk se refieren a crímenes de guerra, crímenes de lesa humanidad y genocidio.
Además, denunció el uso de helicópteros, buques de guerra, tanques y tropas israelíes en la zona del centro de ayuda, lo que habría contribuido a incrementar la mortandad entre la población civil desesperada.
Türk también alertó del uso reiterado de una retórica “intolerable y deshumanizante” por parte de líderes israelíes, y condenó las órdenes de evacuación masivas e incesantes que han obligado a miles de personas a desplazarse una y otra vez desde el inicio del conflicto, hace ya 20 meses.
El acceso a la ayuda, bloqueado
Mientras tanto, la Organización Mundial de la Salud ha reiterado que cuenta con reservas alimentarias y médicas listas para ser distribuidas, pero denunció que no se les permite el acceso. “Lo que necesitamos para hacerlo es que se nos permita el acceso”, explicó Tarik Jašarević, portavoz de la OMS, también presente en la rueda de prensa en Ginebra.
Según detalló, 51 camiones con suministros médicos están esperando poder entrar y abastecer a los pocos hospitales que aún permanecen operativos. “Desafortunadamente, está ocurriendo justo lo contrario. Ya no hay ningún hospital funcionando en el norte de Gaza”, alertó.
La ONU ha reiterado su llamado a establecer corredores humanitarios seguros y a permitir el ingreso sin restricciones de la ayuda, subrayando que el mecanismo actual impide que la población más vulnerable —niños, ancianos, personas con discapacidad— pueda acceder a lo más básico para sobrevivir.
“No hay justificación para no cumplir con estas obligaciones”, sentenció Türk.

Director de Noticias Obreras.
Autor del libro No os dejéis robar la dignidad. El papa Francisco y el trabajo. (Ediciones HOAC, 2019). Coeditor del libro Ahora más que nunca. El compromiso cristiano en el mundo del trabajo. Prólogo del papa Francisco (Ediciones HOAC, 2022)