El obispo de Plasencia apuesta por una Iglesia cercana y comprometida con los problemas sociolaborales

El obispo de Plasencia, Ernesto Brotons Tena, abogó en la XXXI Jornada Diocesana por una Iglesia cercana y comprometida con los problemas sociolaborales, que acompañe a las personas del mundo del trabajo más vulnerables y refuerce su dimensión sociocaritativa
Organizada por la Delegación de Pastoral del Trabajo, con el lema “Tiempo para la esperanza en el mundo del trabajo”, concluyó con un comunicado en el que se reconoce que “no podemos permanecer ajenos a la situación por la que están pasando y cómo están viviendo los empobrecidos y excluidos del Mundo del Trabajo en nuestra Diócesis”.
Para afrontar los restos actuales y abrir caminos nuevos como Iglesia sinodal, en este Año Jubilar, el obispo Brotons llamó a potenciar y reforzar la misión evangelizadora de la Iglesia; desarrollar una pastoral misionera al encuentro de las personas y fortalecer la comunión y la corresponsabilidad; y continuar creciendo en la dimensión caritativa y social de la Iglesia.
Las personas asistentes que debatieron cómo sostener y defender la esperanza, especialmente en este tiempo de cuaresma, entre las personas y familias trabajadoras, acordaron hacer suya la sinodalidad como el modo de caminar de la Iglesia en este siglo XXI, a través del trabajo conjunto, en busca de la sinergia pastoral, en comunión y con responsabilidad, además de promover la dimensión caritativo y social de la Iglesia.
En este sentido, la pastoral del trabajo apuesta por favorecer la cercanía, atención y acompañamiento a las personas empobrecidas y marginadas, favoreciendo “una iglesia y una pastoral de “puertas abiertas” y en actitud “de salida”.
Educar en la dimensión social y política de la fe
Para ello, entienden, sigue siendo necesario educar en la dimensión social y política de la fe para potenciar la presencia, la participación y el compromiso en la vida pública y social, mejorando la formación en Doctrina Social de la Iglesia para sacerdotes, religiosos y religiosas, diáconos permanentes y laicos y laicas.
Avanzar en corresponsabilidad y comunión precisa, según las pastoral del trabajo de la diócesis, descubrir las implicaciones de la pertenencia a la Iglesia, fortalecer las estructuras comunitarias, mejorando la coordinación con las Delegaciones de Cáritas, Apostolado Seglar, Familia y Vida, Migraciones, Pastoral de la Salud y asegurando la participación y responsabilidad de las personas laicas, especialmente de la mujer.
Además, propone, cuidar las celebraciones litúrgicas para que sean sencillas, cercanas, con lenguaje que el otro entienda, participativas, asegurando la unión entre la fe y la vida, apostar por los movimientos especializados de la Acción Católica y cuidar la relación entre estos y las parroquias, de modo que la pastoral de mundo del trabajo sea de verdad de toda la iglesia.
La esencia samaritana de la Iglesia llama a todo el Pueblo de Dios a encontrarse con la realidad de sufrimiento, de soledad, de marginación y exclusión social, a acompañar a grupos, plataformas, asociaciones que se esfuerzan por los derechos de los pobres y a colaborar con las asociaciones e Instituciones públicas que buscan el bien común y se esfuerzan por la dignidad sagrada de la persona.

Redactor jefe de Noticias Obreras