Las discrepancias marcan la recta final para cerrar la subida del SMI de 2025

Las discrepancias marcan la recta final para cerrar la subida del SMI de 2025
FOTO | La ministra de Trabajo, Yolanda Diaz; y el presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, en un acto. Vía Carlos Luján, Europa Press
Mañana, miércoles 22 de enero, a las 16:30 h, se celebra la que podría ser la última reunión para cerrar el acuerdo sobre la actualización del salario mínimo interprofesional (SMI) de 2025. Según el Ministerio de Trabajo, esta convocatoria debería ser definitiva, aunque las diferencias entre las partes implicadas siguen estando en el mismo punto de discrepancia

El Gobierno, a través del Ministerio de Trabajo, ha asumido el mejor escenario planteado por los expertos: una subida del 4,4%. Este incremento situaría el SMI en 1.183,90 euros mensuales, lo que representa un aumento de 49,90 euros al mes y 698,54 euros anuales en 14 pagas. Sin embargo, el Ejecutivo ha precisado que este planteamiento es “flexible” para facilitar un acuerdo.

Además, el Ministerio no ha despejado las dudas planteadas por los sindicatos sobre si la subida del SMI tributará a efectos del IRPF, según ha podido confirmar Noticias Obreras. Pérez Rey, secretario de Estado de Trabajo, señaló que “no es competencia del Ministerio de Trabajo establecer la fiscalidad de los salarios. Eso corresponde al Ministerio de Hacienda”. Esta postura ha generado críticas en las organizaciones de trabajadoras y trabajadores, que recuerdan que “el Ministerio de Trabajo negocia en nombre del Gobierno, y por tanto, la propuesta debe ser integral”.

Objetivo sindical: 1.20o euros al mes

Los sindicatos han reclamado una subida mayor, situada entre un 5% y un 6%, mostrando su disposición a negociar un acuerdo. En el escenario del 5%, el incremento sería de 56,70 euros al mes y 793,80 euros al año, situando el SMI en 1.190,70 euros mensuales. Una subida del 6% implicaría un aumento de 68,04 euros al mes y 952,56 euros al año, alcanzando un SMI de 1.202,04 euros mensuales.

CCOO no ha condicionado esta petición a la tributación y se decanta por los 1.200 euros al mes, cifras que aseguran acercarse al objetivo de garantizar el 60% del salario medio neto, como establece la Carta Social Europea. UGT ha sido más contundente, insistiendo en que la subida debe estar exenta de IRPF por ser una cuestión de “justicia fiscal” y ha advertido que no apoyará el acuerdo si esta exención no se garantiza.

Vincular SMI y reducción de jornada laboral

La patronal, por su parte, sigue cerrando filas contra la subida del SMI. Según fuentes de CEOE y CEPYME, no solo han rechazado las propuestas del Gobierno y los sindicatos, sino que tampoco han ofrecido alternativas concretas. Antonio Garamendi y Gerardo Cuerva, máximos representantes de CEOE y CEPYME respectivamente, han solicitado además vincular el debate del SMI con el de la reducción de la jornada laboral, una cuestión que no ha estado sobre la mesa y que, según expertos, es inviable en las actuales negociaciones.

CEOE ha convocado un comité ejecutivo para la mañana del miércoles, donde se espera que confirmen, por quinta vez consecutiva, su negativa a cualquier incremento del SMI.

Así las cosas, la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, sigue considerando que hay margen para un acuerdo que permita “dar una buena noticia a los trabajadores”. En última instancia, el gobierno se podrá acoger al artículo 27 del Estatuto de los Trabajadores, que determina la “consulta previa” para fijar la subida teniendo en cuenta “el índice de precios de consumo, la productividad media nacional alcanzada, el incremento de la participación del trabajo en la renta nacional y la coyuntura económica general”, también expresado en las conclusiones del informe de la comisión de expertos.