El necesario compromiso político de los cristianos
Resulta urgente reflexionar sobre la necesaria presencia de las personas cristianas en la vida pública y, más concretamente, en la política.
La realidad pone de manifiesto la baja participación de los «jesu-cristianos» en las organizaciones políticas y sindicales. Deberíamos analizar las razones. Tanto las propias del ámbito político como las del eclesial.
Por una parte, la política y los políticos gozan hoy de un gran desprestigio, debido, entre otras razones, a las prácticas corruptas de una minoría, que ha hecho un gran daño a la credibilidad de la acción política al utilizar en beneficio propio las instituciones y los recursos públicos.
Al mismo tiempo, la confrontación político-partidaria, tanto en el ámbito institucional como en el mediático, se está convirtiendo en un espectáculo, situándose en un terreno «embarrado» donde los insultos, las descalificaciones y las fake news son el «pan nuestro» de cada día.
Así mismo, las organizaciones políticas se han ido convirtiendo en «maquinarias» electorales donde son muy escasos los cauces de participación y de debate por parte de la militancia. Son las ejecutivas y los comités de dirección el eje sobre el que pivota la vida de los partidos.
Sin embargo, hablamos de un ámbito donde se está jugando el presente y el futuro de la sociedad, especialmente de los sectores más vulnerables y castigados.
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Profesor de Filosofía (Bilbao)
