Condena por delitos de odio que atentan contra la dignidad de la infancia
La Audiencia Provincial de Málaga ha considerado “delito de odio” los mensajes lanzados en un grupo de Facebook con 14.000 seguidores llamando a agredir a los niños que vivían en las calles de Melilla
El tribunal ha estimado parcialmente la apelación interpuesta por el Servicio Jesuita al Migrante (SJM) y la Fiscalía ante una primera sentencia del Juzgado de lo Penal 2 de Melilla que archivó el caso sin condenas después de la denuncia presentada por la Asociación Prodein, en 2017.
En virtud de la sentencia, han sido condenadas cinco personas a dos años, seis meses y un día de prisión; y otras dos personas, a penas de un año.
La página del grupo en esta red social contenía expresiones humillantes, agresivas y que incitaban a la violencia contra los niños y niñas y adolescentes no acompañados o sin referentes.
Tanto el Informe sobre la evolución de los delitos de odio en España de 2022 como la Memoria de la Fiscalía General del Estado de 2022 señalan que los delitos de odio han aumentado, siendo internet, telefonía y redes sociales los medios más empleados para su comisión.
También el informe anual 2023 de la Agencia de los Derechos Fundamentales de la Unión Europea refleja una tendencia al alza a nivel continental tanto de los delitos de odio impulsados por motivos raciales o étnicos como de episodios de discursos (sobre todo en la red) que han sido o podrían ser constitutivos de delito.
Las personas menores, niños, niñas y adolescentes, debido a su vulnerabilidad y necesidad de protección y especial cuidado, son titulares de derechos específicos recogidos en la Convención sobre los Derechos del Niño, que garantiza el derecho a la protección, a la no discriminación, el interés superior del menor, el derecho a la vida, a la supervivencia, al desarrollo y a la participación.
El SJM ha aprovechado la publicación de la sentencia para seguir promoviendo la reflexión y los espacios de encuentro en aras de la convivencia desde el trato digno a todas las personas que componen la sociedad diversa e intercultural en la que vivimos.
“Apostando, desde esa mirada de riqueza humana, por la acogida de nuestros nuevos vecinos y vecinas; caminando siempre al lado de las personas migradas, en defensa de quienes son castigados por situaciones de exclusión, estigmatización, incomprensión o discriminación; especialmente de aquellas con una situación de especial vulnerabilidad como es la infancia extranjera no acompañada”, se lee en un comunicado del SJM.
Redactor jefe de Noticias Obreras
