Jóvenes trabajadores cristianos denuncian el uso partidista de la educación y reclaman un pacto global inclusivo

Jóvenes trabajadores cristianos denuncian el uso partidista de la educación y reclaman un pacto global inclusivo
La Juventud Obrera Cristiana (JOC) de España advierte que “llevamos más de 40 años de democracia en España y en este tiempo hemos sufrido ocho leyes de educación diferentes”, por lo que aboga por buscar un amplio consenso para reforma el sistema educativo que recoja la opinión de la sociedad  y de la comunidad educativa en particular.

En su opinión, la mayoría de las veces estas leyes se han plasmado en “un texto con la misma base que el anterior”, si bien “cada gobierno ha querido implantar su propia ley, con su propias siglas y con matices importantes en función del estilo de gobierno que quería plantear”.

La cierto es que en democracia se ha aprobado la LGE de Adolfo Suárez, la LODE, LOGSE y LOPEG de Felipe González, la LOCE de Aznar, la LOE de Zapatero, la LOMCE de Rajoy y la nueva LOMLOE aprobada a finales de 2020, cuya implantación deberá hacerse notar ya efectivamente durante el próximo curso.

La JOC, en el artículo editorial del último número de su revista, denuncian que “la educación ha servido hasta ahora como herramienta política para el gobierno de turno” con el fin de “diferenciarse ante el electorado y modificar la formación en base a las necesidades y demandas del mercado laboral, es decir, de la sociedad capitalista”.

“Todo esto, sin consultar a la comunidad educativa, ni a la sociedad en su conjunto”, lamenta la JOC que detalla que los cambios continuos suponen aumentar “la inestabilidad, la incertidumbre, la inseguridad, el estrés y la ansiedad”, en los y las jóvenes, al tiempo que señal señala que los y las  estudiantes no tienen voto, “y en muchos casos tampoco voz para reclamar lo que quieren en su proceso formativo”.

“Necesitamos una educación que busque el desarrollo integral de las estudiantes en cualquier etapa educativa”, reclaman, más aún, “si queremos construir un mundo en el que se ponga en el centro a las personas y se valore más el crecimiento humano que el económico”.

Por ello, este movimiento de jóvenes trabajadores cristianos exige “un pacto por la educación que asiente una base para establecer unos mínimos que garanticen una educación digna”.  “Si de verdad queremos que esta ley sirva para todas, tiene que incluir la opinión y propuestas de la sociedad civil, en especial de la comunidad educativa, que es a la que más le afectarán estos cambios”, han advertido.

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Movilización mundial a favor de la educación

Precisamente, estos días en una reunión de la UNESCO, su directora general Audrey Azoulay, ha hecho un llamamiento  a la movilización mundial “para situar la educación en lo más alto de la agenda y cumplir los Objetivos de Desarrollo Sostenible”. “La pandemia ha agravado la crisis mundial de la educación”, ha lamentado Azoulay.

Según ha afirmado, “el cierre de escuelas ha provocado importantes pérdidas de aprendizaje”. “En los países de ingresos bajos y medianos, el 70% de los niños de 10 años son incapaces de comprender un texto escrito sencillo, frente al 57% de 2019”, ha dicho. Para la directora general de la organización, “sin medidas de apoyo, estos jóvenes se enfrentarán a importantes dificultades para continuar su formación e incorporarse al mundo laboral”.

La organización advierte de que existe una crisis de financiación: el 40% de los países de ingresos bajos y medios redujeron su gasto en educación durante la pandemia. La reducción media fue del 13,5%. Sin embargo, en julio de 2022, los presupuestos todavía no han vuelto a sus niveles de 2019

“Nos preocupa la vacilante financiación de la educación en este momento crítico”, ha declarado la subdirectora general de Educación de la UNESCO, Stefania Giannini, que ha añadido que “cando la financiación pública disminuye, son las familias las que tienen que aumentar su aportación económica”: “Y cuanto más recaiga la factura de la educación en las familias, mayor será el riesgo de que aumente la desigualdad”.