Repartidores | Cultura machista | Camboya

Repartidores | Cultura machista | Camboya
Foto | socialistworker.co.uk

Dubai | Huelga de repartidores

Los repartidores de Talabat, empresa de Deliveroo en la región, han protagonizado en Dubai (Emiratos Árabes Unidos) dos huelgas en dos semanas. Parece una anécdota sin importancia, pero no lo es. Muestra que aún en las peores condiciones la dignidad de los trabajadores puede salir a flote. Son circunstancias muy malas: en Emiratos las huelgas y los sindicatos son ilegales. Gran parte de los trabajadores son inmigrantes de África y Asia, sobre todo, de India y Pakistán. Sus salarios bajos, sus jornadas eternas… Quienes participan en protestas laborales tienen la amenaza de enjuiciamiento y deportación.

Pese a ello, los repartidores, trabajadores inmigrantes, han logrado hacer dos huelgas en protesta por los bajos salarios (que la empresa quiere reducir aún más y alargar las jornadas) y sus malas y peligrosas condiciones de trabajo. Un joven trabajador paquistaní explica que la huelga es «por el futuro» de condiciones dignas en su trabajo. Cuenta que apenas llega a fin de mes, sin un día libre en tres meses, con jornadas diarias de 15 horas, atropellado por automóviles dos veces… Y lucha. ¡Eso es dignidad!

ICM | «Alto a la cultura machista»

La Internacional de Trabajadores de la Construcción y la Madera (ICM) ha puesto en marcha una Red de Campañas con el lema: «Alto a la cultura machista», que quiere reunir a los sindicatos afiliados para que trabajadores y trabajadoras compartan valores y acciones comunes para la eliminación de todas las formas de discriminación, violencia de género y acoso.

La ICM quiere aumentar la conciencia sobre la muy extendida cultura machista en la construcción (que incluye malas jergas, normas sociales y conductas excluyentes), para avanzar hacia entornos de trabajo seguros y con igualdad de género, incluir cláusulas de género en los convenios colectivos y motivar a más trabajadoras a unirse a los sindicatos y trabajar en el sector de la construcción.

También puedes leer —  La Iglesia de Orihuela-Alicante y los sindicatos trazan como prioridad la exigencia de trabajo decente

La ICM considera también que las muy extendidas actitudes y comportamientos machistas en el sector contribuyen a que los empleadores presionen a los trabajadores para que asuman mayores riesgos e ignoren las normas de seguridad y salud en el trabajo.

Camboya | Organización de los trabajadores

Los sindicatos camboyanos han logrado algunos avances hacia el trabajo en condiciones dignas en el sector del textil, calzado y confección, uno de los más potentes en la producción para la exportación, que emplea a más de un millón de personas. Es un sector en el que se han logrado altos niveles de representación sindical.

Pero encuentra más dificultades en otros sectores, como el de la construcción y la fabricación de materiales como cementos y ladrillos. La Federación Sindical de Trabajadores de la Construcción y la Madera de Camboya lucha por extender la organización sindical en el sector, en el que está muy extendida la informalidad y la subcontratación, que hace más complicado actuar contra la violación de los derechos laborales. Además, en la fabricación de ladrillos está muy extendido el trabajo infantil y la servidumbre por deudas.

El sector de la construcción es muy dependiente de las inversiones extranjeras directas, sobre todo, de compañías francesas y chinas, que recurren sistemáticamente a la subcontratación. A pesar de ello, los sindicatos están poniendo un gran empeño en la implantación del salario mínimo y las medidas de salud y seguridad en el trabajo.