El obispo de Burgos media en el conflicto laboral de la Catedral

El obispo de Burgos, Mario Iceta, se ha mostrado dispuesto a nombrar “una instancia comúnmente acordada que arbitre una solución al conflicto laboral” que ha llevado a la plantilla de la Catedral a declarase en huelga.

Según la página web del arzobispado de Burgos, la intervención de Mario Iceta llega tras haber hablado telefónicamente con una de las trabajadoras de la plantilla, a la que transmitió también su disposición “a recibir personalmente a cada uno de los trabajadores que deseen entrevistarse con él”.

Iceta se ha abierto a organizar, asistido por los servicios jurídicos del arzobispado, una reunión entre el abogado del Cabildo y el de los trabajadores, con el fin de abrir una mediación encargada de elaborar una propuesta de solución que ambas partes tendrían que comprometerse a aceptar previamente.

La plantilla que atiende las visitas turísticas a la Catedral de Burgos comenzaron una huelga indefinida el pasado 9 de abril, al anunciarse un nuevo expediente de regulación temporal de empleo, esta vez ante la previsión de menos ingresos, que vendría a sumarse al que se ha estado aplicando desde hace más de dos años por fuerza mayor. Los trabajadores y trabajadoras, además, reclamaban apartar de la gestión de las relaciones laborales a la persona a la que responsabilizan del mal clima laboral actual.

Trabajadores cristianos, acompañan y apoyan

Trabajadores cristianos de Burgos se solidarizaron con la plantilla de la Catedral al conocer de primera mano su situación, sus demandas y sus motivaciones, al tiempo que demandaban a la entidad responsable de la gestión económica de la seo burgalesa explorar “todas las posibilidades de entendimiento para así llegar al punto en que trabajadores y patronal alcancen el acuerdo por el diálogo”.

La plantilla recodaba que han visto en los últimos años “cómo se sumaban los fastos, celebraciones y declaración de beneficios y de mecenazgos, muchos de ellos oficiales, haciendo ostentación de beneficios de la Fundación”.

Integrantes de la Pastoral del Trabajo de la Diócesis de Burgos, en la que participan integrantes de la Hermandad Obrera de Acción Católica (HOAC), la Juventud Obrera Cristiana (JOC) y los Equipos Parroquiales de Pastoral Obrera (EPPO) han mostrado su preocupación ante la grave situación creada, además de “su cercanía y solidaridad” con la plantilla. “No podemos olvidar, además, que detrás de cada trabajadora hay una familia que afronta el futuro con enorme incertidumbre y gran sufrimiento, más en estos tiempos tan complicados”, afirman.

Del mismo modo, la pastoral del trabajo ha insistido en que “ante cualquier tipo de conflicto de orden laboral debe primar el diálogo y el entendimiento, que son fruto de una actitud de respeto y dignificación de los trabajadores”. Así, han pedido a “los responsables que tienen capacidad de obrar y mediar en este conflicto” a que actúen para que se pueda llegar a una solución consensuada que satisfaga a las partes”.

Consciente de que “no siempre las soluciones son sencillas de alcanzar por consenso”, los integrantes de la pastoral del trabajo animaban a explorar “todas las posibilidades de entendimiento para así llegar al punto en que trabajadores y patronal alcancen el acuerdo por el diálogo”. Incluso se habían ofrecido a mediar entre las partes, si así lo consideran oportuno los agentes afectados.

Sin embargo, ha sido el obispo de la diócesis el que finalmente ha intervenido en el conflicto con su propuesta de crear una instancia mediadora que pueda atender las demandas de los trabajadores y los límites propios de la gestión financiera de la Catedral.

Jose Luis Palacios

Redactor jefe de Noticias Obreras