La prórroga del escudo social no deja de ser “un parche”
Hoy entra en vigor una nueva prórroga del llamado escudo social, que contempla la suspensión de los desahucios y cortes de suministro básicos para las familias en situación de vulnerabilidad.
Estas medidas excepcionales seguirán vigentes hasta el 31 de octubre, por lo que se podrá solicitar el aplazamiento del pago del alquiler si se demuestra la situación de vulnerabilidad y el arrendatario cuenta con diez o más viviendas.
Además, se amplía el plazo para pedir una moratoria de tres meses en el pago de las hipotecas y alquileres, mientras se mantiene la posibilidad de prorrogar el contrato de arrendamiento por un periodo máximo de seis meses.
Se extiende también la prohibición de interrumpir los suministros básicos (energía eléctrica, gas natural y agua) y el descuento directo en la factura para las personas y familias más vulnerables.
Con todo, esta nueva extensión del llamado escudo social ha recibido críticas de activistas anti desahucios y de sindicatos, por la escasa cobertura real, que, de hecho, permite que los desahucios continúen. “Después de dos prórrogas, sigue siendo un parche, que no es suficiente”, advierten desde UGT. En su opinión “es necesaria la aprobación, con carácter permanente, de una red de protección social que no deje caer a nadie”.
Las organizaciones de trabajadores apoyan la aprobación de una ley de vivienda, que recoja las reivindicaciones de la sociedad civil. En concreto, UGT considera necesario la promoción pública de un parque de viviendas en alquiler, que actualmente no pasa del 2,5% de las viviendas levantadas, así como el control de los precios de alquiler y la regulación del sector inmobiliario.
La subida de los salarios
También demanda actuar igualmente en el mercado de la energía. “Ante la subida injustificable y continua del precio de la luz, exige también reformar el sistema de fijación del precio de la electricidad o adoptar de forma permanente la bajada del IVA, medida provisional que ha introducido el Gobierno con el Real Decreto Ley 12/2021”, se lee en un comunicado.
De igual manera, este sindicato pide “la mejora del Ingreso Mínimo Vital, para que llegue a todos los que lo necesiten; el mantenimiento de los ERTES frente a los despidos, un mecanismo que ha llegado para quedarse; y la subida del salario mínimo interprofesional este año, vital para cientos de miles de trabajadores y trabajadoras y que permitirá impulsar el consumo y la economía”.
Redactor jefe de Noticias Obreras